El Premio Nobel de la Paz argentino envió una carta a todos los legisladores porteños para que hagan una “reflexión” y no aprueben el pase a la Nación de todos los ex centros clandestinos ubicados en la Ciudad.
A raíz del proyecto enviado por el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, para que la Legislatura de la Ciudad convalide el convenio firmado entre el Gobierno Nacional y el capitalino que habilite el traspaso de todos los ex centros clandestinos a la órbita nacional, el referente de Derechos Humanos Adolfo Pérez Esquivel, solicitó a los legisladores porteños que no acompañen la iniciativa.
El Premio Nobel de la Paz y Presidente del Servicio Paz y Justicia envió una carta a todos los legisladores porteños haciendo un “llamado a una profunda reflexión” sobre el acuerdo suscripto entre el Pro y el Frente Para la Victoria.
Tal como mencionó oportunamente parlamentario.com, ese convenio, que el Cuerpo Parlamentario porteño debe aprobar, la administración macrista le cede a la kirchnerista el manejo de todos los centros de detención clandestina que funcionaron durante la dictadura militar y que ahora fueron convertidos en espacios para la memoria. En este esquema se encuentra los predios de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), Virrey Cevallos, Club Atlético, Olimpo y Automotores Orletti.
“Este intento tiene fuertes connotaciones políticas que conjugan el erróneo deseo de una de las partes, de apropiación de esos espacios de memoria, con la de la otra que nunca tuvo interés en los mismos y siempre incumplió la efectivización de las partidas presupuestarias votadas por ustedes destinadas a su preservación”, cuestionó duramente.
Por otra parte, Pérez Esquivel denunció que este convenio fue aprobado y mantenido en secreto durante casi tres meses, que viola los convenios previamente firmados por tomar medidas sin consultar al IEM como organismo autónomo y autárquico de consulta obligatoria, y que al parecer se estarían poniendo en duda algunos puestos de trabajo de quienes se oponen a la disolución.
“Confiamos en que los legisladores actúen con dignidad y conciencia crítica, privilegiando los valores fundamentales de la democracia, por encima de la ‘obediencia debida’, que tanto daño le hizo a nuestro pueblo, y voten el rechazo del proyecto”, concluyó.
