Al adelantar su apoyo en general al proyecto del Ejecutivo, el socialista alertó sobre las suspensiones que se están dando y dijo que el “poco empleo” que viene generando el sector privado “es no registrado”.
El senador Rubén Giustiniani adelantó el acompañamiento de su bloque a un proyecto que consideró positivo. Habló luego de muchos interrogantes que se abren, porque “hay muchas empresas que han ganado mucho dinero; el trabajador que está en negro se encuentra discriminado, sobre todo en un escenario de alta inflación”. De entrada, planteó que “uno de los principales generadores de trabajo no registrado es el Estado”, por lo que consideró que una de las responsabilidades del Congreso es para terminar con esa práctica planteó votar a favor, pero comenzar a dar pasos en la dirección de revertirlo.
Recordó que al preguntársele al ministro Tomada qué cantidad de trabajadores calculaban que serían registrados, el funcionario no dio precisiones, por lo que el socialista dejó abierto el interrogante. Luego advirtió sobre las suspensiones que se están registrando, sobre todo en el rubro automotriz, porque “desde hace meses, en la Argentina, el sector privado no tiene la dinámica que tuvo años anteriores en la generación de empleo genuino, y el poco empleo que se va generando es empleo no registrado”.
Recordó que lo habían advertido cuando se subió la tasa de interés, medidas que “van en un sentido contrario de los derechos de los trabajadores. Sabemos que mucho del éxito de una herramienta como la que estamos aprobando, es que se de en un contexto de situación virtuosa”.
A continuación se refirió a los aportes patronales y recordó que en oportunidad de su visita al Senado, le dijeron al ministro Carlos Tomada que no estaban de acuerdo en reducir los aportes de las grandes empresas, por lo que celebró que se hubiera escuchado lo planteado en esa reunión, en cuanto al escalón puesto en los 80 empleados para considerar esa prerrogativa.
Con relación al sistema previsional, admitió que el artículo 20 genera dudas, que en ese caso compartió con Liliana Negre de Alonso, pero aclaró que “acá hay que considerar que el principal problema que tiene la recaudación del sistema previsional es que existan trabajadores no registrados en la proporción que tenemos”. En ese sentido alertó que el sistema de reparto funciona en todo el mundo cuando 3 o 4 personas activas hay por cada pasiva, mientras que en nuestro medio hay apenas 1,7 por cada jubilado, lo cual no puede hacer que el sistema perdure en el tiempo.
Puso dudas sobre el escalón marcado por la ley sobre las pymes, entre 15 empleados y 80, que a su juicio no coincide siquiera con la ley que reglamenta el funcionamiento de las pequeñas y medianas empresas, por lo que pidió que se siga abordando la cuestión y que “este sea el punto de partida para ello”.
Advirtió que mientras el trabajo en negro sea elevado, la pobreza seguirá siendo elevada. “¿Cómo se combate la pobreza? –se preguntó-. Con el crecimiento económico, ha quedado demostrado que no alcanza, se debe lograr a través de cambiar la matriz tributaria. Mientras tengamos el IVA en los niveles que tenemos; mientras tengamos Ganancias en estos niveles, y mientras tengamos exenciones para las grandes empresas como las que tenemos, estaremos lejos de que paguen los que más tienen”.