Desde las 14.28, los senadores debaten la iniciativa enviada por la Casa Rosada en el marco del conflicto con los fondos buitre. Gerardo Zamora ejerce la conducción del cuerpo en reemplazo del vicepresidente Amado Boudou.
La Cámara de Senadores de la Nación sesiona desde las 14.28 con el objetivo de otorgarle media sanción al proyecto de ley enviado por la Casa Rosada para que los bancos centrales extranjeros sean inmunes a la jurisdicción de los tribunales de nuestro país, algo de lo que se espera reciprocidad con los activos argentinos en el marco del litigio con los fondos buitre.
Aunque había trascendido que el vicepresidente Amado Boudou podía llegar a conducir esta sesión especial, finalmente el rol es ejercido por el presidente provisional del cuerpo, el senador santiagueño Gerardo Zamora, aliado del oficialismo.
El kirchnerismo habría tomado esta decisión para no poner en riesgo la aprobación del proyecto oficial, una herramienta que quiere el Gobierno para evitar posibles embargos por parte de los holdouts.
En efecto, desde que fue procesado todo el arco opositor le reclamó a Boudou que se tome licencia hasta que se esclarezca el caso. De hecho, un sector liderado por el cordobés Luis Juez amenazó con retirarse del recinto en caso de que el vice presidiera una sesión.
La conducción de Zamora asegura un debate distendido y expeditivo, ya que el proyecto es avalado en líneas generales por las bancadas opositoras.
El proyecto
La propuesta de ley establece la inmunidad de “los bancos centrales extranjeros u otras autoridades monetarias extranjeras a la jurisdicción de los tribunales argentinos” siempre y cuando no exista “consentimiento expreso manifestado por escrito”.
Pero en su texto también ordena a la Argentina a suscribir convenios internacionales para que los activos del Banco Central de nuestro país gocen de la misma inmunidad frente a eventuales embargos de tribunales foráneos. Una medida que evitaría embargos de los fondos buitre en aquellos países con los que se alcance el acuerdo mutuo.
La iniciativa fue aprobada la semana pasada por la Comisión de Relaciones Exteriores y este mismo jueves por la Comisión de Economía, donde se le introdujo modificaciones técnicas pedidas por la oposición.
La propuesta del Ejecutivo fue girada al Congreso en el marco del litigio con los fondos buitres y la posibilidad de que estos acreedores embarguen activos del Estado argentino como forma de cobro de la deuda pública externa no reestructurada.
Cabe recordar que el país ya sufrió un episodio traumático cuando un grupo de acreedores quiso apropiarse de la Fragata Libertad, detenida en Ghana en 2012.
