El vicepresidente conducirá la sesión informativa y podrá hacer su descargo ante los senadores que piden su licencia por su procesamiento en la causa Ciccone. El arco opositor ahora quiere apartarlo por “inhabilidad moral”.
Dispuesto a enfrentar cara a cara a la oposición, el vicepresidente Amado Boudou decidió presidir la sesión informativa con el jefe de Gabinete y aprovechará la oportunidad para hacer su descargo ante los senadores que piden su apartamiento por estar procesado en la causa Ciccone.
Así fue anunciado durante la reunión de Labor Parlamentaria, ante lo cual la oposición decidió retirarse para analizar los pasos a seguir.
“No queremos que Boudou esté en la Cámara”, dijeron los senadores opositores, que tenían previsto presentar un proyecto de resolución pidiendo que el Cuerpo suspendiera al vicepresidente en sus funciones en el Senado.
“Es una decisión política”, se informó escuetamente en referencia a la postura de Boudou, quien se suponía que viajaría este miércoles a Colombia, con lo cual no estaría al frente de la sesión. Pero ya se sabía de los deseos del vicepresidente de presidir las sesiones, cosa que rechaza la oposición.
En consiguiente, el arco opositor decidió bajar al recinto una vez que el Frente para la Victoria logre quórum en la sesión con el jefe de ministros, Jorge Capitanich.
Tal como lo habían adelantado, los opositores insistirán con el pedido de licencia de Amado Boudou, esta vez a través de un proyecto de resolución que apela al artículo 66 de la Constitución Nacional para suspender a un miembro del Poder Legislativo en virtud de “inhabilitación moral”.
Sin embargo existen dudas sobre la constitucionalidad de la medida ya que el vicepresidente es miembro del Poder Ejecutivo y, aunque ejercer la titularidad del Senado, no tiene voz ni voto excepto en caso de empate en una votación.
El citado artículo reza: “cada Cámara hará su reglamento y podrá con dos tercios de votos, corregir a cualquiera de sus miembros por desorden de conducta en el ejercicio de sus funciones, o removerlo por inhabilidad física o moral sobreviniente a su incorporación, y hasta excluirle de su seno; pero bastará la mayoría de uno sobre la mitad de los presentes para decidir en las renuncias que voluntariamente hicieren de sus cargos”.
