El ministro de Economía Axel Kicillof admitió ante algunos funcionarios su preocupación sobre el rumbo económico. La pelea con el titular del Banco Central Juan Carlos Fábrega está al rojo vivo.
El panorama económico se está desmoronando día a día, en medio de funcionarios del Gobierno que están admitiendo preocupación pero a la vez, una gran interna dentro del gabinete.
Sin dudas que el funcionario clave de todo esto es el ministro de Economía, Axel Kicillof, quien está evidenciando preocupación y hasta desorientación por la evolución de las principales variables, al tiempo que está enfrascado en un lucha durísima con el titular del Banco Central, Juan Carlos Fábrega.
Si bien cuenta con el fuerte aval de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, admitió en las últimas horas una “cierta desorientación” de la marcha de la economía.
Esa es la conclusión que sacaron algunos gobernadores que hablaron con él en los últimos días y con los que no tuvo problemas en admitir que no le encuentra la solución a los cada vez más apremiantes problemas económicos.
En esas charlas vinculadas en principio a temas de gestión, el funcionario reconoció que la economía está “en caída libre”.
La admisión causó estupor entre sus interlocutores, que escucharon atónitos a un Kicillof que hablaba más como analista opositor que como ministro.
Pero a la vez, según comentaron algunos funcionarios en Casa de Gobierno en las últimas horas, Kicillof está decidido a seguir dando batalla contra Fábrega, con quien no tiene prácticamente diálogo.
Es más, uno de esos funcionarios dejó una frase sumamente inquietante. “Hay un acuerdo que se está trabajando con China, para lograr un convenio de compensación de reservas monetarias, es decir, para reforzar las reservas, pero desde el Ministerio de Economía cada vez ponen más palos en la rueda”, puntualizó el funcionario.
Justamente, para lograr ese acuerdo, Fábrega viajó hace pocos días a Basilea y allí se reunió con autoridades chinas, pero todavía no hubo ninguna novedad de ese tipo de acuerdo denominados en la jerga económica como “swap”.
Y como si fuera poco esta interna en estos últimos días salieron versiones donde se anticipa el inminente regreso al país de Guillermo Moreno a la Argentina.
Según insisten fuentes en el Ministerio de Economía, Moreno regresará al país desde Italia en el próximo mes de noviembre.
Se dice que su regreso es más bien político, aunque no se descarta que pueda volver a tener fuerte injerencia en lo económico, sobre todo viendo la marcha muy complicada de la economía bajo la gestión Kicillof.
Esto demuestra que en la Argentina actual todo se recicla, todo vuelve, más allá que sea positivo o negativo.
