En la sesión de este jueves el Senado de la provincia de Buenos Aires sancionó un proyecto de ley para fomentar la Economía Social y Solidaria a través de la creación de un programa de promoción y desarrollo y la conformación de un Fondo de Financiamiento. La iniciativa fue presentada por la diputada Fernanda Raverta a partir del trabajo articulado con distintas organizaciones sociales que integran la Red de Microcrédito y Educación Popular de la provincia. El proyecto, según se consigna en sus fundamentos, comprende un conjunto de recursos y actividades que promueven el desarrollo de la Economía Social y que buscan atender las necesidades de los trabajadores, sus familias, comunidades y del medio ambiente, con la finalidad de lograr una sociedad más justa, inclusiva e igualitaria.

“La iniciativa tuvo un carácter participativo ya que fue elaborada con el aporte de distintas organizaciones sociales de la provincia que conocen las problemáticas particulares, los desafíos y la realidad concreta por la que atraviesan quienes trabajan a partir de la lógica de la Economía Social”, expresó al respecto la diputada.

Entre otras cuestiones, en el articulado se destaca la creación de un Fondo de Financiamiento para la Promoción de la Economía Social y Solidaria y la implementación de un registro de actores de la Economía Social.

Por otra parte, se establecen estrategias educativas de capacitación y asesoramiento destinadas a mejorar los procesos de organización, de producción y comercialización de los productos de la Economía Social y a transmitir e incorporar los principios y valores de solidaridad, cooperación y consumo responsable en la sociedad.

El sistema económico social y solidario, que se pretende fomentar a través de este proyecto de ley, está integrado por personas físicas o grupos asociativos que basen su accionar y se organicen en torno a la gestión del autoempleo, como las cooperativas de trabajo, mutuales, asociaciones civiles, fundaciones, agrupaciones de microemprendedores, emprendimientos comunitarios, clubes del trueque, ferias y mercados asociativos populares, redes de comercio justo, organizaciones de microcrédito, bancos populares, empresas recuperadas, redes de consumo responsable, y organizaciones libres del pueblo sin fines de lucro.