Responsable de la política energética de los últimos 11 años, el ministro de Planificación, Julio De Vido, defendió en la Cámara de Diputados la reforma a la Ley de Hidrocarburos de cara al objetivo de alcanzar el autoabastecimiento energético del país.

Ante un plenario de comisiones, De Vido expuso los requisitos y beneficios que tendrán las empresas extranjeras que inviertan en el país y destacó la “consolidación del Estado en la regulación” de la industria energética, incluyendo el “fortalecimiento de los Estados provinciales”.

Según el ministro, el nuevo régimen de promoción se “adecua a la necesidad y el escenario creado por nuestra presidenta con la recuperación” de YPF, momento en el cual se declaró de interés público todas las actividades relacionadas a los hidrocarburos.

Enfatizó entonces que la ley busca alcanzar la “soberanía hidrocarburífera, el ahorro de divisas, el fortalecimiento de las provincias y la generación de fuentes de trabajo”.

El funcionario indicó que, para atraer inversiones, el proyecto establece un “tratamiento fiscal uniforme en todas las jurisdicciones” y requisitos de cuidado ambiental.

Por otra parte, De Vido resaltó que “los resultados de la recuperación de YPF son notables”, al punto tal que ese año se recuperó un 11 por ciento la producción de gas y un 9 por ciento la de petróleo.

En este marco, informó que, según Estados Unidos, Argentina tiene la segunda reserva de gas no convencional más importante del mundo y la cuarta reserva de sheil oil. Esto, indicó, representa 123 años de consumo de petróleo y 110 de gas, de mantenerse el nivel de consumo actual.

Por eso dijo que YPF debe ser el “actor estratégico” en el desarrollo de la industria de hidrocarburos, con la participación del Estado nacional y las provincias, que aseguró nunca habían tenido participación en la empresa desde su recuperación estatal en 2012.