Feletti impulsó un dictamen de rechazo ante un pedido de los radicales pero luego debió mandar el proyecto a los asesores para no habilitar su tratamiento en el recinto.
El presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados, Roberto Feletti, estuvo a punto de habilitar dictámenes sobre modificación al Impuesto a las Ganancias, pero debió dar marcha atrás con su propuesta para no habilitar su tratamiento en el recinto.
Fue este jueves, en el marco de una reunión de comisión, cuando el radical Miguel Giubergia (Jujuy) solicitó que se pusieran a consideración las iniciativas de la oposición.
“Como presidente de la comisión voy a recomendar el rechazo del proyecto”, anunció Feletti. “Perdón presidente, usted me anuncia un dictamen de mayoría. Yo voy a firmar uno de minoría”, reaccionó Giubergia. “Sí, claro”, obtuvo como respuesta.
Más lúcidos que Feletti, un grupo de kirchneristas salió a pedir que el tema vuelva a ser estudiado por los asesores de la comisión. Porque la firma de dictámenes habilitaría su tratamiento en el recinto, es decir, le facilitaría el camino a la oposición en caso de que en los próximos dos años logre mayoría parlamentaria.
“Hay un tema técnico: nosotros votamos para que el proyecto vaya a comisión. No hay dictamen”, impuso Mario Pais. “Pero podemos votar en contra”, insistió Feletti.
“¡Apoyo al presidente de la comisión!”, saltó Fernando Sánchez, de la Coalición Cívica, quien se avivó del error de Feletti.
El formoseño Luis Basterra cortó por lo sano. “A ver presidente. Usted vota con ellos y nosotros recomendamos devolverlo a comisión”, sugirió irónico. Feletti no perdió su sobriedad para aceptar el camino seguido por sus pares y el tema no pasó a mayores.
“Para el peronismo de hoy, el refrán es 'de la casa al trabajo, del trabajo a pagar ganancias y recién después a casa', así es como lo quiere el kirchnerismo”, ironizó Giubergia.
El kirchnerista Carlos Heller (Nuevo Encuentro) manifestó: “en todo el mundo se cobra Ganancias. Quiero que entiendan que estamos hablando del 11 por ciento de los asalariados. Es cierto que hay cosas que corregir porque los gravados con salarios más bajos sufren descuentos, pero hay un fenómeno de gremios grandes como camioneros y bancarios que tienen a sus empleados alcanzados por Ganancias. La mayoría no los tiene”.
