Tras la aparición del cuerpo sin vida del fiscal especial de la causa AMIA, Alberto Nisman, el jefe de Gobierno porteño Mauricio Macri expresó que este es “un momento de aturdimiento, de shock, indignación, bronca e impotencia”. Asimismo, Macri se preguntó “cómo puede ser que la violencia esté ganando de vuelta la vida pública argentina”. El líder del Pro insistió en la necesidad de que la justicia actúe de “forma rápida e independiente” para saber lo que realmente pasó con el fiscal.

Además, Macri consideró de suma importancia que la denuncia realizada contra la presidenta continúe su curso. “Que se investigue, que sepamos qué va a pasar con las pruebas, que el Congreso siga adelante. Es un desastre para el futuro institucional de nuestro país si todo esto queda en impunidad”.

El precandidato presidencial expresó que este es un momento “bisagra” en la Argentina, un antes y después en el cual “se debe dar la transparencia del accionar de los servicios de inteligencia, que deben estar al servicio de la Nación y no de un partido”.

“Hay que investigar hasta las últimas consecuencias. Nos corresponde ser prudentes y dejar que la justicia nos informe. En estos momentos hay que apostar a recuperar las instituciones, que se continúe avanzando en ver qué de verdad había o no en la denuncia del fiscal”, sostuvo Mauricio Macri.

El jefe de Gobierno porteño agregó: “Que no nos ganen a los argentinos ni el miedo ni la resignación. Nosotros vamos a poder terminar con esta violencia, estamos convencidos que lo podemos hacer”.

En similitud a las palabras referidas por Macri, el diputado Sergio Bergman manifestó lo “bochornoso que es que la Argentina esté en todos los medios del mundo por la noticia de que murió el fiscal que denunció a la presidenta”.

Por su parte, la senadora nacional Gabriela Michetti expresó que “estamos acostumbrados en la Argentina a que las cosas se van ocultando, y quedan sin resolver”. Por eso consideró fundamental que la investigación se haga de la manera más correcta.