La sesión especial de este miércoles comenzó en la Legislatura pasadas las 13.30, con la presencia de 43 diputados en el recinto. Fue presidida por los vicepresidentes primero y segundo del Cuerpo, Cristian Ritondo (Pro) y Dante Gullo (FpV), respectivamente.

El único tema para tratar durante el encuentro fue el expediente Nº 75-D-2015, que permitió suspender la aplicación de la Boleta Única Electrónica en los comicios del 26 de abril. En la votación general la iniciativa fue aprobada con 55 votos positivos, 2 negativos- de los diputados Marcelo Ramal y Alejandro Bodart- y una abstención del legislador Pablo Bergel. El voto positivo de Edgardo Form (Nuevo Encuentro) no quedó reflejado en pantalla, ya que el legislador no pudo emitir su voto con el nuevo sistema.

El primero de los legisladores en pronunciarse fue Francisco Quintana (Pro), quien enumeró una serie de factores a tener en cuenta para garantizar el proceso eleccionario en la Ciudad. “La implementación de este nuevo sistema requiere de tres bases esenciales para cumplir sus objetivos, como lo son establecer las normas que regulan el proceso; la capacitación y difusión; y la confianza de los actores involucrado”, expresó.

Y agregó que “por ello, es que entendemos que estos pilares deben ser atendidos en un tiempo adecuado para que la sociedad, los partidos políticos y las instituciones estatales aprehendan el nuevo sistema. Y, en esta línea, entendemos que la aplicación de la boleta única electrónica en las próximas PASO a realizarse el 26 de abril de 2015, no resulta prudente”.

Por su parte, el diputado Marcelo Ramal (FIT) destacó que no iba a apoyar el proyecto con su voto, y criticó duramente la falta de responsabilidad que implicaba la derogación de la ley votada por ese mismo Cuerpo parlamentario en 2013. Además, disparó contra “la salvaje” interna dentro del Pro.

El diputado Alejandro Bodart (MST- Nueva Izquierda) ironizó en un principio: “tengo problemas con la pantalla”, en referencia al nuevo sistema con el que cuentan los diputados en el recinto y, que más tarde, dificultaría el proceso de votación.

“Creo que lamentablemente lo que podría haber sido un avance en la democratización de la Ciudad terminó en un verdadero papelón”, expresó.

Además, reclamó que las fuerzas opositoras cuando pasan al poder “acomodan todo a su antojo, cuando gobiernan hacen lo mismo que reclamaban”.

“El resultado de lo que en un principio fue una viveza política para mostrarse como el modernizador y beneficiar a su candidato, termina en un papelón”. Bodart también habló de una “súper boleta sábana” en la que se viola la ley de Comunas “porque ahora la gente se ve arrastrada a votar jefe, legisladores, y comuneros en una misma lista”.

“Un sector de la oposición en su momento criticó la boleta única de papel, me refiero al Frente para la Victoria, sin embargo cuando se implementó el voto electrónico se aliaron”. Y sostuvo que el apoyo del bloque K se dio gracias a que se “facilitaba que se vote por sello conocido”.

Bodart afirmó que no acompañaría la iniciativa con su voto. “Creo que no le conviene a la gente esto que se está haciendo, espero que algún día haya gobernantes que piensen en lo que le conviene a la gente”, finalizó.

En su turno, la presidenta del bloque kirchnerista, Gabriela Alegre, le contestó en un principio a Bodart y aseguró que “es pura fábula pensar que se favorece a algún sello. ¿El diputado piensa que los sellos de izquierda no son conocidos después de fracasar en tantas elecciones?”

Alegre resaltó que el FpV alertó en la audiencia pública del 14 de enero sobre el escaso tiempo para la implementación y manifestó que “la innovación sin la preparación necesaria podría poner en riesgo el proceso electoral”. Por eso sostuvo: “vamos a votar a favor por la responsabilidad institucional”.

Por su parte, el legislador Aníbal Ibarra (Frente Progresista y Popular) expresó que “esto es el símbolo de la improvisación mezclado con intencionalidad política donde someten a la sociedad a los vaivenes de una interna”. Ibarra apuntó directamente a la lucha que hay dentro del Pro para poder suceder al jefe de Gobierno porteño y afirmó el voto de bloque a favor sólo porque “es necesaria la reparación de tamaña improvisación”.

El vicepresidente tercero, Maximiliano Ferraro (Coalición Cívica) pidió “reivindicar y reconocer las leyes de ética pública y la de internas abiertas y obligatorias junto a la implementación de boleta única” que se votó en la Legislatura.

“Venimos a sacarle las papas del fuego a un oficialismo que incurrió en mora. Y que más que hacer una licitación pública, hizo una contratación directa”, en referencia a la empresa MSA S.A. que salió adjudicada para ofrecer el servicio.

A su turno, el legislador Pablo BergeI (Bien Común) recordó el episodio ocurrido hace un año atrás con la inscripción online en las escuelas, y expresó que en este Gobierno no hay “eficiencia”. “La modernización es un maquillaje, como lo verde”, agregó.

También resaltó que se “siguen subordinando y negando a las comunas” sus derechos al avanzar sobre el artículo 20 de las comunas.

El diputado Helio Rebot (Pro) aseguró que “no se estaba violando la ley de comunas” porque esa discusión ya se había abordado al momento de discutir la ley de Boleta Única. Rebot manifestó que cuando se dictó la reforma en el sistema de votación y las internas primarias y obligatorias en la Ciudad “se estableció que fuera el Estado el garante de las boletas. Así, la boleta no la tiene nadie antes de que la persona emita su voto”.

“Se estableció también que los partidos iban a dejar de financiar las boletas, y que el Estado las iba a pagar”, agregó.

En cuanto a los partidos políticos la ley aprobada define que “teniendo en cuenta lo dispuesto por la Ley N° 26.571 y no encontrándose vigente procedimiento legal para la adjudicación de color partidario en la actualidad, las agrupaciones políticas podrán solicitar y hacer valer la utilización de los colores que hayan usado en el proceso electoral del año 2013. En el caso de alianzas partidarias, se podrá optar por el color de alguno de los partidos políticos que la integran”.

Por otra parte, el Poder Ejecutivo otorgará a las listas de las agrupaciones políticas que oficialicen candidaturas un aporte para colaborar con los gastos de impresión de las boletas electorales. El mismo será equivalente a 2 boletas por elector registrado en la ciudad fijando el valor de boleta completa en $0.30 centavos o de $0.10 centavos por categoría de candidatos.

Los reclamos de los legisladores de la oposición se basaron principalmente en un conjunto de “irregularidades” como la tardanza en la reglamentación de la ley, la especulación hasta la definición del cronograma electoral, la licitación a la empresa que ofrece el sistema, entre otros. Además, todos insistieron en que sus votos iban a ser a favor solamente por el compromiso de garantizarle a la población un proceso eleccionario transparente.

En la votación general la aprobación contó con 55 votos positivos, 2 negativos y 1 abstención. Mientras que en la particular fueron 56 positivos, 2 negativos y ninguna abstención. Sobre el artículo 7, hubo 54 positivos y 4 negativos, de los diputados Marcelo Ramal, Alejandro Bodart, Gustavo Vera y Pablo Bergel.