“En primer lugar quiero destacar al Semanario Parlamentario por su reconocida por su especialización y el seguimiento de los temas parlamentarios, que lo convierte en una fuente de información que tiene el máximo nivel de conocimiento y rigor en las tareas que realiza. También lo que hacen los periodistas acreditados en el Congreso forma parte de la calidad de la democracia. Cada vez hay periodistas más especializados en temas parlamentarios con mucha severidad y rigurosidad en el juicio crítico a la tarea parlamentaria.

Quiero rescatar como presidente de la Cámara de Diputados, ya que termino el 10 de diciembre, la actitud de los presidentes de bloque. No sería honesto si no planteara que me he encontrado con una actitud de caballerosidad institucional y de cooperación. Una cosa es el debate por la expresión de las ideas, por las posiciones políticas que cada uno defiende con pasión y con convicción; pero otra cosa es la actitud humana en la construcción del funcionamiento institucional. A todos los presidentes de bloque que hoy están presentes, mi sincero reconocimiento, porque una institución no puede ser llevada adelante sin el acompañamiento del conjunto, de lo diverso, de lo plural.

Creo que como generación, nosotros tenemos un desafío absolutamente diferente a otras generaciones. Somos la generación que ha vivido bajo la vigencia de los más de 30 años de democracia y el Estado de Derecho. Y eso, más allá de las pertenencias partidarias, nos obliga a tener una visión de propósitos compartidos.

Yo no comparto esa idea de que no hay visión estratégica en la Argentina. Creo que los años de la recuperación de la democracia fueron años donde se planteó un sueño colectivo de los argentinos, que era recuperar el Estado de Derecho. Todavía recordamos de aquel tiempo los célebres debates parlamentarios que nos hacían vibrar. Yo soy parte de un Gobierno del cual siento que muchos temas han sido estratégicos para el desarrollo de la Argentina: el desendeudamiento, el tema de Repsol-YPF, la Ley de Pago Soberano, el nuevo Código Civil y Comercial, la Ley de Inclusión Previsional, la Ley de Hidrocarburos, el nuevo Código Procesal Penal… respetando las diferencias, entiendo que son señales esperanzadoras del futuro. Siempre hay cosas por corregir, y esa es la riqueza de la democracia. Además, el debate nos obliga a tener una actitud permanente de escucha y de cambio. Quienes tengan que conducir el Parlamento, la Nación, las provincias y los municipios, van a tener que tener capacidad de escucha. Hay muchísimas más voces críticas en la sociedad, y eso nos obliga a nosotros a cambiar sin importar el lugar político.

El año pasado fue uno de los más ricos en materia legislativa: se sancionaron 174 leyes. En los últimos 20 años, fue el año más productivo en materia legislativa. La democracia puede cumplir con su mandato, y ha sido el Congreso el lugar donde se ha planteado la visión hacia adelante, con opiniones a favor y críticas, ya que esa es la esencia del sistema democrático.

Creo que todavía tenemos una deuda: esta democracia requiere mayor fortaleza de los partidos políticos. Si la democracia argentina tiene una deuda, es haber desinstitucionalizado los partidos políticos y muchas veces haber tomado decisiones para congraciarse con los de afuera. Los dirigentes políticos tenemos una responsabilidad diferente. Cuando las instituciones se resquebrajan, como los partidos políticos, tenemos el problema de que nos gobiernen quienes no provienen de la política. Los periodistas tienen el rol de hacer periodismo; los empresarios, el de generar riqueza; y los dirigentes políticos, coordinar propósitos nacionales y conducir hacia el futuro. Esta sigue siendo una asignatura pendiente. Tenemos que volver a debatir en nuestros partidos, tenemos que volver a tener ideas que le den identidad y razón de ser a nuestra pertenencia partidaria. Todo este tiempo, en mi reflexión personal, necesitamos revisar la Ley de Partidos Políticos con el orgullo de servir a la política, no con la vergüenza de pertenecer a la política. Hubo normas que se han votado desde la vergüenza de pertenecer a la política. (aplausos)

Nosotros (y creo que es una opinión compartida con todos los legisladores) sentimos orgullo de estar en la política y sentimos que la política es vocación de servicio. Y las diferencias, lejos de fracturarnos, son puntos donde cada uno tiene que defender lo que cree. Uno es lo que es, sino no puede asumir la tarea de la responsabilidad pública. No se puede ser de una manera según me convenga a mí o a mi oportunismo electoral. La política tiene valores diferentes a los del mercado, y muchas veces se han generado crisis cuando la política se mercantilizó.

Hay un llamado de este tiempo, de los 30 años de democracia, a fortalecer las instituciones que establece nuestra propia Constitución. Por eso mi reconocimiento a todos los legisladores que son militantes políticos comprometidos y que rinden cuenta de lo que hacen todos los días. Los que somos del Interior, los fines de semana vamos a nuestros pueblos donde nos exigen, nos tocan el timbre, nos controlan el auto que tenemos, la casa donde vivimos, si creció nuestro patrimonio o no. Tenemos un control social cotidiano. Por eso la voz crítica ayuda. Pero lo importante es que la voz crítica no sea con el propósito de descalificar, sino que esté orientada a marcar el camino futuro, y ésta es la riqueza de un año electoral: marcar la agenda de los próximos años en la Argentina.

Quiero agradecerle a nuestras familias. Cada uno de nosotros tiene deudas con nuestras propias familias por el tiempo que le dedicamos a nuestra vocación. Nuestras familias muchas veces pagan un costo enorme por la falta de tiempo que le dedicamos.

Parlamentario vino a quedarse como una voz calificada. Y seguramente la Tecnicatura Legislativa mejorará la calidad de nuestros cuerpos del Senado y de la Cámara de Diputados. Lo que podamos hacer en materia de jerarquización académica va a contribuir al proceso de formación de las leyes.

También mi agradecimiento a los periodistas de esta casa, que muchas veces con la severidad crítica nos han permitido corregir y ayudar a crear un buen clima de trabajo en el Congreso de la Nación.

Felicitaciones a todos los legisladores premiados. Muchas gracias”.