Este lunes en el Salón Raúl Alfonsín de la Legislatura porteña, el legislador y precandidato a jefe de Gobierno, Gustavo Vera (Bien Común), presentó junto a trabajadores de los hospitales Ricardo Gutiérrez, Pedro de Elizalde – ex Casa Cuna -, Juan A. Fernández y Piñero un proyecto de ley de Emergencia de los Servicios de Terapia en los hospitales públicos.

La iniciativa tiene como ejes principales que el personal del área intensiva de los hospitales trabaje durante guardias que no superen las 12 horas, acceda a una jubilación anticipada y tenga un plus salarial del 50 % sobre el básico mensual, que en la actualidad es de $6850.

Según los fundamentos del proyecto “los servicios de terapia intensiva son cada vez más requeridos y no solamente necesitan contar con recursos físicos sino con recursos humanos especializados y en condiciones de poder hacer frente a las exigencias”.

Respecto de esto, Vera explica que “el déficit de profesionales que se va agudizando con el tiempo se debe a las bajas remuneraciones y a las malas condiciones de trabajo que determinan que los médicos especialistas en la referida área se vayan alejando del hospital público para pasar a desempeñarse en el sector privado. A su vez, esa pérdida paulatina de profesionales especializados no puede ser cubierta porque los posibles reemplazos no se presentan a los concursos por las mismas razones que causan el alejamiento de los que se van, es decir las bajas remuneraciones y las malas condiciones de trabajo. Se genera así un círculo vicioso que conlleva la decadencia de un área crítica del subsistema estatal de salud”.

Durante el encuentro el titular de la fundación La Alameda señaló que los funcionarios de la Legislatura porteña “se atienden por ley en el sector privado a través de Medicus”, y agregó que “si ellos son los que tienen a cargo formar lo público, y no creen en lo público, ¿cómo no se va a ir todo a la basura?”.

Vera recalcó que se realizará “una fuerte campaña pública para obligar al tratamiento del proyecto” y así tome estado parlamentario.

La propuesta busca que se incremente el número del personal que atiende en los servicios de terapia intensiva y se aseguren e incentiven los puestos de trabajo. También considera fundamental “tener en cuenta las enfermedades profesionales generadas a partir de las situaciones de stress, para lo cual resulta indispensable la reducción horaria de las jornadas laborales de las guardias”.