Martín Lousteau, Graciela Ocaña y Andrés Borthagaray presentaron sus propuestas para gobernar la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, en el programa de TN A Dos Voces. Hubo coincidencias y mínimas discrepancias. El próximo miércoles será el turno de los rivales del Pro, Gabriela Michetti y Horacio Rodríguez Larreta.
Por Melisa Jofré
En un clima de “buenos amigos” los precandidatos a jefe de Gobierno porteño por la alianza Energía Ciudadana Organizada protagonizaron este miércoles el primer debate de cara a los comicios del 26 de abril próximo. Martín Lousteau, Graciela Ocaña y Andrés Borthagaray debatieron en el programa A dos voces, del canal de cable TN, sobre tres ejes: la relación Ciudad-Nación; desarrollo social y seguridad: pobreza, salud y educación; y desarrollo urbano: infraestructura, medio ambiente, transporte y vivienda.
Sin una hinchada fervorosa, cada uno de los competidores por suceder a Mauricio Macri contó con el apoyo de sus asesores, dirigentes y compañeros de lista de legisladores, quienes se hicieron presentes en el estudio. El ex ministro de Economía tuvo su “platea vip” encabezada por los diputados nacionales Elisa Carrió, diputados Fernando Sánchez y Roy Cortina -estos últimos precandidatos a vicejefe y primer legislador, respectivamente-. El actor Luis Brandoni se sumó para apoyar al radical Andrés Borthagaray.
Antes de comenzar con el desarrollo de sus propuestas, Lousteau y Ocaña repasaron una y otra vez entre sus apuntes. La “Hormiguita” llegó repleta de carteles que mostró ante las cámaras en más de una oportunidad.
La suerte del sorteo recayó sobre Borthagaray, quien arrancó: “desde hace 30 años me dedicó a Buenos Aires, desde muy joven asumí compromisos políticos”. El arquitecto puso el énfasis en las mejoras que se necesitan en el transporte y el espacio público. Por su parte, Lousteau expresó que su equipo tiene “la vocación de transformación de la realidad” y señaló que “hay que confiar que podemos ser mejores” en referencia a la gestión del Pro. A su turno, la legisladora porteña Graciela Ocaña habló de su gestión en PAMI y sostuvo: “saben de mi trabajo, mi lucha”, y agregó que la honestidad es el factor fundamental de su espacio Confianza Pública.
A la hora de debatir sobre la relación entre el Ejecutivo porteño y el Gobierno nacional, Ocaña manifestó: “la Ciudad tiene que dejar de ser rehén”. Además, hizo hincapié en la necesidad de devolverle a la Ciudad las competencias en lo relacionado a la seguridad, el juego, la zona portuaria, y la intervención en las causas de narcotráfico.
Por su parte, Lousteau dijo que “fue sano un contrapeso al Gobierno nacional” en referencia al Pro, pero criticó los pactos Pro-K en el juego y los negocios inmobiliarios, donde según el economista, ambos bloques “encontraron mutuamente conveniencia”.
Borthagaray puntualizó en la necesidad de derogar la ley Cafiero, mientras que el precandidato de SUMA+ subrayó que “el Pro se cerró, se ha municipalizado. La Ciudad tiene que hablar con los 7 municipios que la rodean”.
Los tres competidores de ECO coincidieron al criticar el gasto de 2 millones de pesos, por día, que se hace de la publicidad oficial del Gobierno porteño. “Hacemos un jardín maternal”, sostuvo Lousteau.
Dentro del segundo eje de discusión, sobre pobreza, educación y salud, Lousteau los calificó como “los temas más importantes” y expresó que en el presupuesto del Pro, el porcentaje otorgado a estas áreas fue cayendo año tras año. El tema salud “es lo peor”, sentenció.
Ocaña puso el énfasis en el tema seguridad y consideró fundamental las medidas del traspaso de la Policía Federal, la instalación de cámaras, los botones antipánico para los mayores y el “terminar con las zonas liberadas”. En cuanto a la educación mencionó la doble escolaridad en los colegios de las zonas vulnerables y el boleto educativo no sólo para alumnos sino también para docentes.
Por su parte, Borthagaray lanzó que “una Ciudad inclusiva va a ser más segura” y habló de calles iluminadas, y tecnología para la educación.
Al momento de la réplica, Lousteau discrepó con Ocaña al decirle: “yo sé que es tu área pero en la salud sí que tenemos que ser fundacionales”. A lo que la “Hormiguita” le dio la razón y expresó que “el gobierno de Macri no hizo nada. Sólo administró lo que había”. Y continuó: “los turnos telefónicos son un verso, no funcionan”.
“Tenés mal la voz, pero…”, le disparó Lousteau a Ocaña para frenarla en su discurso. “¿Qué tendrá ese té?”, agregó. Más tarde, también le contestó que no sólo servía la instalación de cámaras para resolver la inseguridad.
En cuanto al desarrollo urbano los postulantes coincidieron en lo positivo del metrobus, pero Borthagaray señaló “tratan de vender el metrobus como si fuera el subte que no se hizo”.
“Como porteño me da bronca lo de la basura”, dijo Lousteau, quien al igual que sus contrincantes repudió duramente el estado de la basura en las calles de la Ciudad. Mientras que Ocaña explicó su programa “Manzana verde” para que a través del reciclaje “el premio no sea a las empresas sino a la gente”, así los vecinos que reciclen podrán ganarse pagar una cuota menos de ABL en el año.
En el minuto final para cerrar sus discursos, Lousteau llamó a “construir una alternancia real” y le pidió al electorado porteño que le permita la posibilidad de competir en un balotaje con el Pro. “La honestidad y manos limpias están acá”, concluyó Ocaña, quien además convocó a los jubilados a votar en las PASO. Bothagaray reconoció tener el “coraje cívico y el fervor por Buenos Aires” para gobernar la Ciudad.
La “Hormuguita” finalizó afirmando que el voto para ella le asegura a los porteños “un 2×1”, ya que si sale victoriosa en las primarias, convocará a Martín Lousteau para la fórmula.
