Uno de los dos senadores en votar en contra denunció que “la destrucción del ferrocarril fue el plan más perverso” y que “nunca hubo un Estado mas estúpido y estafado que éste”.
Fernando “Pino” Solanas, uno de los dos senadores en votar en contra de la propuesta oficial para gerenciar los ferrocarriles, exigió auditar primero los bienes entregados a los concesionarios y disparó que “nunca hubo un Estado mas estúpido y estafado que éste”.
Solanas, que como cineasta dirigió la película “La próxima estación” y militó activamente contra la privatización de los ferrocarriles, denunció que en los ’90 se produjo “una fiesta del saqueo”.
“La destrucción del ferrocarril fue el plan más perverso”, aseveró, al precisar que los concesionarios “se robaron los 37 talleres-fábricas” y “tanto se robó que desaparecieron cuatro mil vagones del Belgrano Cargas”.
Además, advirtió que el desmantelamiento del servicio “ha aislado mil pueblos y más de un millón de argentinos debió migrar a las capitales”.
“El tema de los ferrocarriles no tiene que tener distinciones partidarias. Este tema estratégico está ligado a qué modelo de país queremos”, explicó.
“Pino” consideró que previo a la ley debería realizarse una auditoría de los bienes entregados a los concesionarios.
“Lo primero es exigirle a los concesionarios la reposición de todos los bienes que se les entregaron para que mantuvieran el servicio en funcionamiento”, enfatizó.
En un durísimo discurso, el senador de Proyecto Sur denunció que “nunca hubo un Estado mas estúpido y estafado que éste”.
Asimismo, criticó que no se declare a los ferrocarriles como “servicio público” y que “no haya organismos de control”, al considerar que “no basta con la Auditoría General de la Nación”.
