En un encuentro signado por el discurso presidencial del jueves, se realizó en Parque Norte el Congreso Nacional del Partido Justicialista, que resolvió formalmente la integración de frentes con vistas a las elecciones PASO del 9 de agosto y las generales del 25 de octubre.

Encargado de hacer esa moción fue el gobernador salteño Juan Manuel Urtubey, quien expresó en su discurso que en ese lugar estaba reunido “el peronismo serio y en serio”.

Urtubey se pronunció a favor de “institucionalizar las políticas de Néstor y Cristina”, y aclaró que “el peronismo no va a hacer alianza con sectores de poder, no las necesita”.

Obviamente el encuentro estuvo signado por el discurso del día anterior de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien desde el Chaco reclamó “un baño de humildad a los compañeros de nuestro espacio para que reconozcan y acompañen a quien está mejor capacitado para una función”.

El presidente del Partido Justicialista, el jujeño Eduardo Fellner, recordó que “siempre hemos sido frentistas, no tenemos miedo de compartir los ideales de Perón y Eva con los compañeros de otros partidos”. Y agregó: “Estamos reunidos porque queremos seguir siendo gobierno, porque queremos darle respuesta a los argentinos”.

Con referencia al pedido de “humildad” de la mandataria, su alter ego jurídico Carlos Zannini se manifestó a favor de “elegir la fórmula de las PASO lo más acotada posible”. Para el secretario Legal y Técnico de la Presidenta, “será el voto de la sociedad el que decida quién es el compañero que tiene que seguir con el proyecto, que tiene que seguir con la lucha por los más humildes, y la lucha contra las corporaciones y los buitre”.

Uno de los presidenciables, el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, al ser consultado sobre el “baño de humildad” para algunos dirigentes, afirmó que “al que le quepa el sayo que se lo ponga”.

Asimismo se manifestó “totalmente de acuerdo con lo planteado por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner”, y agregó: “Yo vengo sosteniendo hace tiempo que el poder económico y mediático impulsa candidatos y los protege”.

En este sentido Randazzo planteó: “Comparto plenamente con la presidenta que quien sea candidato de esta fuerza política debe ser un hombre que tenga poca preocupación por las tapas de los diarios sino por seguir adelante con las políticas impulsadas por este gobierno”.

El ministro señaló también que “el Partido Justicialista tiene un carácter frentista, y para este proceso de transformación no alcanza sólo con el peronismo”. “El kirchnerismo está compuesto por muchas fuerzas políticas que participarán de este frente de cara a las PASO”, finalizó.

Por su lado, el titular de la Cámara de Diputados de la Nación y precandidato a gobernador bonaerense, Julián Domínguez, dijo que “la convocatoria (de la presidenta) a la humildad es la actitud que tiene que regir la vida de todos los políticos. La política es vocación de servicio y nos debemos a nuestro pueblo. Sin el pueblo no somos nada”, afirmó.

Sobre la interna por la Gobernación bonaerense, el presidente de la Cámara de Diputados señaló que “la cantidad de candidatos habla de la riqueza del FpV, pero como decía el general Perón, los melones sobre la marcha se van a ir acomodando”.

También presidenciable, el ministro de Defensa Agustín Rossi dijo que “el FpV va a ser una expresión claramente competitiva, vamos a buscar ganar las elecciones, para que el próximo presidente a partir del 10 de diciembre de 2015 sea surgido de las filas del Frente par ala Victoria”.

Rossi interpretó que Cristina Kirchner hizo tres reflexiones: “En primer lugar expresó claramente que el candidato del Frente para la Victoria debe ser un candidato que confronte con el poder corporativo en Argentina. Somos una expresión política cercana a lo popular y sus intereses y hemos gobernado en función de esos intereses. En segundo lugar hizo una convocatoria, una advocación fuertemente para que todos los dirigentes políticos hagamos primar el sentido colectivo de la construcción política y no las expectativas o las legítimas ambiciones personales”.

“Y por último una cuestión que es absolutamente razonable, no podemos tener 12 precandidatos en la provincia de Buenos Aires. También parece razonable tener una menor cantidad de candidatos a presidente pero eso la misma dinámica del proceso político lo va a ir generando y ordenando”, señaló, sin decir nada sobre la cantidad de precandidatos presidenciales.