Durante doce años el kirchnerismo se negó a debates obligatorios entre los candidatos a cargos públicos. Pero sugestivamente, a meses de que Cristina Fernández deje el gobierno, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, salió a respaldar la propuesta.

En diálogo con los periodistas, antes de ingresar a la Casa de Gobierno, Fernández sostuvo que es necesario que “los candidatos que vayan a participar se expresen y hagan conocer a la sociedad argentina cual es la voluntad que tengan para que se sostengan ese tipo de políticas. Es muy importante decir y reclamarlo, no que termine siendo una expresión de queja, al contrario”, afirmó.

“Estoy convencido que en algún momento debiéramos sacar una ley nacional que diga que para esas cosas es obligatorio el debate y el que no participa del debate no puede participar de las primarias” y agregó que después de las primarias debería darse “otro debate del que sea obligatorio participar antes de las generales”.

Explicó que ahora se vive “siempre condicionado con el ritmo de la campaña y las posibilidades ciertas que tiene cada uno de llevar a la práctica su propuesta política” y recordó que el senador nacional kirchnerista (Eduardo) Aguilar, de Chaco, “tenía una propuesta de esta característica que alguna vez la charlamos en firme pero las elecciones estaban demasiado cerca como para darse esa discusión”, no obstante “creo que para las próximas elecciones se puede trabajar perfectamente”.

Aníbal Fernández sostuvo que el debate es obligatorio en muchos países, pues es necesario “tener que expresarse y contar a la sociedad para que la sociedad sepa lo que está dispuesto a hacer y en función de eso votarlo y en todo caso después pueda reclamarle concretamente si hizo o no lo hizo lo que se comprometió a hacer en campaña”.

Consultado sobre el lugar donde deberían realizarse los debates, si en la sede académica o en un canal de televisión, el jefe de Gabinete dijo que es cuestión de que los candidatos se pongan de acuerdo, aunque se manifestó a favor de que tenga lugar en una Universidad.

“En tanto y en cuanto se pongan de acuerdo los candidatos me da lo mismo”, dijo y agregó “es cuestión de los candidatos se pongan de acuerdo: puede ser la televisión pública, puede ser un canal libre, una universidad. La universidad –agregó- garantiza ecuanimidad”.

El objetivo del debate, agregó, es que “nos sirva a todos” y agregó que en su caso su deseo es “contarle a la sociedad que pretendo hacer si llego a ser gobernador de la provincia de Buenos Aires”.

Las declaraciones se producen un día después de que Cristina Kirchner reclamara a los candidatos debatir “ideas” y “propuestas” de gobierno en lugar de hacer “pantomimas”.

Precisamente la semana pasada la oposición realizó un debate en el Congreso sobre la necesidad de impulsar una ley de tales características.