Por primera vez en 31 años de democracia, la posibilidad de concretar un debate presidencial está cerca de convertirse en realidad. La presión ejercida por varias organizaciones de la sociedad civil y los proyectos presentados por distintos bloques en el Congreso darían sus frutos para los comicios de este año.

Luego de que el propio jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, sorprendiera con el deseo de que se sancione una ley para obligar al debate entre los postulantes a la Presidencia, el presidente de la Comisión de Pastoral Social del Episcopado, Jorge Lozano, reveló la buena predisposición de los tres principales candidatos.

Lozano anunció este jueves que se contactó con los precandidatos presidenciales que mejor miden en las encuestas, Daniel Scioli (FpV), Mauricio Macri (Pro) y Sergio Massa (Frente Renovador), quienes aceptaron participar de un debate televisado, pero “después de las PASO”.

“Ya hablamos con Scioli, con Massa y con Macri, y los tres estaban de acuerdo con un debate. No se concretó dónde, pero sí, que sea después de las PASO” del 9 de agosto, afirmó Lozano, en corcondancia con algunos proyectos de ley que promueven que esta instancia se realice después de las primarias, cuando ya se conocen quiénes son los candidatos definitivos.

En declaraciones a radio América, el prelado sostuvo que “para la Iglesia es importante que haya un debate entre los distintos candidatos a diferentes cargos” de cara a las elecciones generales de octubre.

Lozano resaltó que “a nivel nacional la gente pueda tener acceso a estas instancias, si es un canal de TV, en una universidad, una ONG, eso depende de cada candidato, pero la población tiene que tener la posibilidad de ese debate”.

Mientras tanto, un grupo de ONGs promueve la iniciativa Argentina Debate y el sitio Change.org encara una campaña que ya reunió más de 25 mil firmas, con el fin de que la ciudadanía tenga acceso a la información electoral a través de estos debates.