Como tantas veces en estos años, el Gobierno es el que mantiene la iniciativa mientras que la oposición reacciona siempre tarde. Esta vez fue con el anuncio del envío de un proyecto de ley para hacer automática la movilidad de la Asignación Universal por Hijo (AUH). La oposición, primero criticó la medida allá por 2009 cuando fue implementada, llegando incluso a utilizar algunos exabruptos que ya todos conocemos; posteriormente, cuando no solo los argentinos sino los principales organismos internacionales (Banco Mundial, CEPAL, FAO, etc.) destacaron a esta medida como uno de los principales programas para la lucha contra la pobreza y el hambre, a la oposición no le quedó más remedio que reconocerla, pero como era de esperarse, cambió su discurso para reclamar que la misma debía ser creada por medio de una ley.

Una vez más, volvió a llegar tarde. Esto se debe a que la AUH es un derecho adquirido que ya tiene carácter legal, porque fue creada mediante un Decreto de Necesidad y Urgencia que fue remitido al Congreso y que, al ser aprobado, adquirió tal carácter. Más específicamente, integra la Ley 24.714 de Régimen de las Asignaciones Familiares, a través del Decreto 1.602 del año 2009.

Por este motivo, este lunes lo que la presidenta Fernández de Kirchner anunció fue el envío de un proyecto de ley para hacer automática la movilidad de la AUH, utilizando el mismo esquema que tienen las jubilaciones. Esto significa que se ajustará dos veces por año, en línea con la fórmula que rige en la Ley 26.417 de movilidad jubilatoria. Esta fórmula depende de cuatro elementos: la evolución de los salarios, los ingresos fiscales, la recaudación previsional y la variación en la cantidad de beneficiarios de ese sistema.

De esta forma, se asegura que el poder adquisitivo de la AUH no solo se mantenga en el tiempo sino que además se incremente, en línea con la mejora en la actividad económica. Esto resulta claro cuando uno analiza la evolución del haber mínimo jubilatorio desde comienzos de 2009, cuando entró en vigencia la movilidad. En los 6 años que pasaron entre marzo de 2009 y 2015, el haber mínimo se incrementó 454%, y aún comparando con el índice opositor más elevado (IPC Congreso), que durante ese mismo período observó un aumento del 320% en los precios, resulta evidente su mejora durante todo este período.

Además de lo anterior, la presidenta anunció un último incremento de la AUH del 30%, que pasará de 644 a 837 pesos. La importancia de esta medida se ve reflejada en su alcance: beneficia a 3.642.302 niños, 69.085 embarazadas y 2 millones de familias. Asimismo, como lo destacó ayer, la totalidad de los hogares que reciben esta asignación se sitúan entre el primer y el quinto decil de los ingresos, teniendo un impacto y una participación mayor en los ingresos más bajos, ya que el 42% de los hogares que la reciben se ubican en el decil más bajo. Esto significa que la AUH llega a las personas a las que debe llegar, promoviendo la igualdad de oportunidades y mejorando considerablemente sus condiciones de vida.

Otro hecho sumamente relevante para mencionar es que esta asignación resulta una de las políticas más importantes en materia de empoderamiento de las mujeres, dado que el 80% de las personas que cobran la AUH son mujeres, madres solteras o jefas de hogares.

Por último, se debe mencionar también el impacto que tiene a nivel agregado de la economía. Como esta medida beneficia a aquellas personas con menores ingresos, su impacto es doble ya que no solo repercute positivamente en el nivel de actividad a través del consumo, sino que también contribuye a hacer más equitativa la distribución de los ingresos de la sociedad argentina.

Resulta indiscutible la importancia que tiene en la actualidad la Asignación Universal por Hijo que hoy, 6 años después de su creación, es un Derecho adquirido para todos los niños y niñas de la Argentina.

*Diputado Nacional del Frente para la Victoria.