La Casa Rosada ratificó que no promoverá la discusión de la legalización de la interrupción voluntaria del embarazo pese a que los abortos clandestinos son la principal causa de muerte materna en el país.

Lo hizo a través del jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, quien en diálogo con la prensa se refirió al malestar de la Conferencia Episcopal Argentina sobre un supuesto “Protocolo para la atención integral de las personas con derecho a la interrupción legal del embarazo”.

Sin embargo, el Ministerio de Salud desconoció su existencia pero admitió que existe una guía para la práctica de abortos no punibles, debido a la exigencia de la Corte Suprema de Justicia de la Nación en el fallo F.A.L. de 2012.

Al respecto, Aníbal Fernández precisó que “la Corte Suprema de Justicia ya se expidió sobre la cuestión, y la Corte ha dicho que la modificación del artículo 86 del Código Penal, que es el que hablaba del aborto no punible, es el artículo que decía que en `la mujer violada idiota` -usa ese término- podía ser practicado el aborto”.

En ese sentido, interpretó que lo que la Corte Suprema “termina diciendo es que cuando se refiere específicamente a la posibilidad de practicar un aborto ante una violación, no habla de 'mujer idiota', habla de cualquier mujer que tenga esa responsabilidad; que es una decisión personal”.

“Si la Corte lo tiene dicho, y aún no se ha legislado sobre la cuestión, bueno, sabemos cuál es la doctrina de la Corte y sobre esa doctrina se va a trabajar en cualquiera de los casos. A veces lo que sucede es que por dilatarlo, en términos de lo jurídico, ponemos en riesgo la vida de la mujer y siempre es la mujer la que termina pagando”, apuntó.

Para Fernández, “esa es una de las tantas injusticias a las que se somete a la mujer en esta humanidad”. “La Argentina, por satisfacción personal si se quiere, es la que menos conflicto tiene. Pero que la Argentina tiene muchísimos conflictos todavía…En donde la mujer siempre es la que termina pagando la vuelta de todos estos conflictos; es verdad también”, señaló.

“Tenemos que ser muy cuidadosos con estos temas -reflexionó Fernández-. No es un tema que estuviera hoy en la agenda del Gobierno, no es un tema que está en la agenda del Gobierno, ya se los he explicado meses atrás, pero no deja de ser un tema muy importante, donde la Corte de Justicia ya se ha expedido y no se necesita mucha más explicación sobre ese artículo 86 del código Penal”, remarcó.

Preguntado sobre si en los próximos años en la Argentina se debatirá la despenalización del aborto, el jefe de Gabinete dijo: “Yo estoy convencido que en algún momento habrá un ámbito para darse un debate de esas características. Lo va a haber. No es éste el momento ni está en la agenda del gobierno, en algún momento lo va a haber”.

El funcionario consideró que “yo he hecho conocer muchas veces mis posiciones. En algunas situaciones creo que hay que tenerlo en cuenta (el aborto), ante la violación de la mujer, es uno de los casos claros, en otros casos estoy decididamente en contra. Pero así como me pasa a mí, le pasa a muchos y ese debate que es un debate muy cuidadoso y muy pulcro porque rozamos aristas de distintos temas y de distintas posiciones doctrinarias y religiosas, tiene que ser un tema muy bien tratado”.

El jefe de Gabinete señaló que una hipotética legislación sobre la despenalización del aborto, “no puede tratarse a los apurones y en un pasillo”. “Tiene que ser pensado, muy, muy debatido para llegar a un punto en donde la decisión a que se llegue, la decisión que se tome, sea la que más cerca esté de lo que piensa la sociedad argentina. Pero bueno, ya llegará el momento. Hoy no es agenda del Gobierno”, concluyó.