Por pedido del Gobierno nacional, la Sala II de la Cámara de Casación Penal removió al juez Juan Carlos Gemignani.
Tras aceptar un pedido del Estado nacional, la Sala II de la Cámara de Casación Penal apartó al juez Juan Carlos Gemignani, quien debía definir la validez del Memorándum con Irán por la causa AMIA, y era el último de los jueces que quedaba en la causa.
Además, la Cámara dio lugar a un pedido de exclusión de la magistrada Ana María Figueroa, quien había sido denunciada por Gemignani a causa de su “participación” en la remoción de Luis María Cabral.
La recusación fue dictaminada por los camaristas Norberto Frontini y Roberto Boico, quienes fueron designados como subrogantes por la mayoría kirchnerista del Consejo de la Magistratura.
Ambos jueces asumieron gracias a la polémica ley de Subrogancias , actualmente suspendida y a la espera de que la Corte Suprema declare sobre su constitucionalidad o inconstitucionalidad.
Ya en junio pasado, mediante dicha ley, el kirchnerismo había logrado remover al magistrado Luis María Cabral.
En lugar de Cabral fue designado Claudio Vázquez, un abogado de Lomas de Zamora afín con el oficialismo y nombrado por la mayoría kirchnerista del Consejo.
Los nuevos jueces que integrarán el tribunal para resolver la constitucionalidad del Memorándum con Irán deberán ser designados por la Presidencia de Casación.
Luego de conocer la sentencia, Jorge Knoblovits, secretario general de la Delegación de Asociaciones Israelitas (DAIA), calificó la medida como un “horror judicial”.
