El senador Juan Carlos Marino presentó un proyecto mediante el cual solicita la determinación de un nuevo precio de referencia para el biodiesel, el cual es abonado por las destilerías encargadas de mezclar este biocombustible con aquellos carburantes de origen fósil.

Marino indicó que, como herencia del gobierno anterior, queda un andamiaje de reglamentaciones sobre las actividades productivas, que en muchos casos tendrán que revisarse. El de los biocombustibles es uno de ellos.

En el marco de una batería de resoluciones, se estableció la creación de un organismo interministerial, la Unidad Ejecutiva Interdisciplinaria de Monitoreo, encargado de fijar el precio de referencia que perciben las firmas productoras de biodiesel de parte de aquellas destilerías encargadas de mezclar los combustibles fósiles con los biocombustibles.

El legislador pampeano destacó que dicho precio se fija sobre la base de una formula polinómica en la cual, el costo del aceite de soja tiene una ponderación especial ya que constituye un insumo fundamental para la producción.

“El problema es que el ultimo precio de referencia es de principios de octubre, momento en el que la realidad cambiaria era distinta y, en consecuencia, el precio del aceite de soja era totalmente diferente. Hoy, al regir el último precio de referencia del 2 de octubre del año pasado, resulta antieconómico proveer biodiesel, y por ello las plantas están totalmente paradas, incluidas las que se encuentran en provincia de La Pampa”, explicó Marino.

En relación a esta situación, es que solicita que con la mayor diligencia se reúna la Unidad Ejecutiva y publique un nuevo precio.

Por último, el exintendente de Miguel Riglos se mostró confiado en que el nuevo gobierno comprenderá plenamente el reclamo y actuará consecuentemente, proporcionando un precio actualizado según el nuevo escenario cambiario, que regirá transitoriamente hasta tanto se defina un nuevo marco regulatorio para la actividad.