Además de explicar a lo largo del día su postura respecto al caso del despacho que el Frente para la Victoria reclama para Máximo Kirchner, el titular de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, aprovechó para exponer sobre una materia que domina a la perfección, llamada “peronismo”.

Así lo hizo por la noche en el programa Intratables, del canal América, donde señaló que “el peronismo después de una derrota, después de las crisis, es el partido que más rápido se renueva, porque es un partido muy inteligente y ágil”. En ese sentido, se manifestó convencido de que “en los próximos dos años va a haber una renovación en el PJ”.

En ese marco, trazó la división que ve venir en la Cámara que él preside: con “diputados nacionales que responden a la sociedad, o a una legitimación en su territorio, o a un gobernador; después tenemos otro peronismo que directamente responde a Cristina Kirchner”.

“Así se divide el Frente para la Victoria –resumió-. A partir de ahí va a germinar una división donde el peronismo se va a renovar en el contexto de los gobernadores; (Sergio) Massa puede ser una figura trascendente, creo que el gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, puede ser otra figura renovadora dentro del PJ; estoy convencido Florencio Randazzo hoy está en silencio, pero yo creo que es una figura que en cualquier momento vuelve a aparecer… Yo creo que va a haber una renovación dentro del peronismo, por afuera del kirchnerismo”.

En resumidas cuentas, anticipó que “va a haber una Cámpora por un lado, con un criterio ideológico respondiendo a Cristina a Máximo Kirchner”, y por otro lado “el peronismo se va a mover detrás de Randazzo, Massa y Urtubey. Para mí Scioli va a tender hacia el kirchnerismo más duro”.

Según el presidente de la Cámara de Diputados, histórico armador del Pro, “el común denominador de los que estarían tomando distancia es hacerse observar ante la sociedad; el otro grupo se observa ante Cristina y me parece que ahí se marca una diferencia importante”.

Excluyó del peronismo que viene a la expresidenta de la Nación: “Creo que se impone un cambio generacional en el país, me parece que no van a tener alternativa por un tema más de fondo: una renovación. Ninguno de estos actores van a dejar pasar la oportunidad en los próximos años”.

Por otra parte, aclaró que “el partido peronista tiene fama de atropellar, por lo que pasó con De la Rúa, con la Alianza. Pero el partido peronista, el peronismo y los gobernadores, me refiero a esa corriente de gobernabilidad, son muy solidarios a la hora de gobernar”.

“Solo ocurre que al peronismo le gusta estar mucho en el poder; si fallás gobernando, si nosotros fallamos gobernando, por supuesto que esta historia y este escenario va a cambiar”, razonó. En ese caso, estimó que “el peronismo se va a unificar y va a ver el hueco y va a ir por el poder”.

“Es más, no le gusta estar afuera, pero es muy solidario a la hora de gobernar”, dijo, reiterando que “el partido peronista no es un partido que le gusta golpear para entrar al poder. Todo lo contrario, por alguna confusión que hubo en el 2001, donde lo que falló fue el gobierno que administraba en ese momento el país, ahí si el peronismo se reunifica y vuelve al poder. Pero si eso no ocurre, el peronismo es el más solidario para gobernar”.

Asimismo aclaró que “el partido peronista no está poniendo palos en la rueda, porque ahí es donde nos prestamos a una confusión. Hay una parte del kirchnerismo, o La Cámpora, para identificarlo como un núcleo más duro, que sí es una protesta permanente, pero el peronismo es mucho más que eso, y el peronismo hoy está siendo responsable a la hora de hablar de gobernabilidad”.