El frente que supo ser la segunda fuerza en la Ciudad de Buenos Aires, al punto casi de jaquear al Pro en el balotaje porteño, se diluyó en la Legislatura en menos de un año. Primero fue la salida de Graciela Ocaña, la diputada que jugó en internas con Martín Lousteau por la Jefatura del […]
El frente que supo ser la segunda fuerza en la Ciudad de Buenos Aires, al punto casi de jaquear al Pro en el balotaje porteño, se diluyó en la Legislatura en menos de un año. Primero fue la salida de Graciela Ocaña, la diputada que jugó en internas con Martín Lousteau por la Jefatura del Gobierno.
La “Hormiguita” abandonó el interbloque llevándose consigo dos legisladores más de su espacio, Confianza Pública. Ahora, el espacio “liderado” por el embajador en los Estados Unidos sufrió la salida de los “lilitos” Maximiliano Ferraro y Paula Oliveto Lago.
Los representantes de la Coalición Cívica en el Parlamento dejaron sentada su ruptura con ECO ante la Presidencia. Según pudo saber Parlamentario, los diputados no estuvieron de acuerdo con “decisiones” del actual diplomático en las que solamente el bloque radical de SUMA+ fue parte.
En declaraciones radiales, Oliveto Lago explicó que “eso hizo interpretar que no nos consideraba o valoraba dentro de su espacio. Más allá de eso, creemos que es un excelente dirigente y no nos arrepentimos de haber hecho una alianza con él”.
“En buenos términos, así como lo hizo Graciela (Ocaña), hemos decidido dar un paso al costado y continuar con nuestra identidad que es la Coalición Cívica”, sostuvo la legisladora.
