Luego de la inauguración del período de sesiones ordinarias del Congreso de la Nación, la diputada nacional Carla Carrizo (UCR-Capital) expresó su satisfacción por “el mensaje de unidad, el señalamiento de la herencia en base a datos sólidos y la presentación de una agenda de gobierno orientada a entender a la justicia como un servicio público y medular de la Argentina siglo XXI, y señaló que “con la conformación de la nueva Cámara baja el país debe avanzar hacia una profunda reforma política”.

La legisladora destacó que “este año vamos a tener un nuevo Congreso, con nuevos integrantes, y una distribución de fuerzas muy diferente a la que estábamos acostumbrados. Por lo tanto, creo que debemos dar el debate necesario y avanzar hacia una profunda reforma política”.

“Deberíamos definir temas tan importantes como el cupo femenino en la Corte Suprema, una ley de partido políticos, la obligatoriedad de los debates, el financiamiento partidario y la equidad en representación en la Cámara de Diputados”, añadió la diputada que integra el sector que desde del bloque radical llevará adelante la evaluación de los proyectos de reforma política que vendrán del Ejecutivo y los que el Congreso instalará.

En ese sentido señaló que “una ley de partidos políticos evitaría el negocio del partido propio: debe haber menos partidos y más eficientes. Con la cantidad de partidos que hay, la boleta única sería impracticable”, y agregó: “Si queremos garantizar pisos mínimos de información para que sean un espacio real de poder para la sociedad civil, debemos establecer, entre otras reformas, la obligatoriedad de los debates”, añadió la representante de la Ciudad de Buenos Aires.

“Debemos avanzar en un debate profundo sobre el federalismo en Argentina, que no es sólo fiscal, sino también político e institucional” sostuvo y añadió: “el Congreso hoy no representa bien y en parte por eso los argentinos no somos iguales ante la ley. Hoy la provincia donde uno nace condiciona los derechos a los que se accede. Eso lo ha generado el federalismo distorsionado que tenemos y hay que revisarlo”, señaló, para finalizar diciendo que “el debate presidencial, regulado, contribuirá a que el electorado pueda contar con una mayorcantidad de elementos para decidir su voto, equipara las condiciones entre los candidatos y evita que los oficialismos no se expongan en público”.