Ambos bloques presentaron sendas iniciativas para declarar la emergencia laboral y ocupacional ante la situación que atraviesan miles de trabajadores.
El massismo y el Frente para la Victoria presentaron sendos proyectos para frenar la ola de despidos que se desató tanto en el sector público como en el privado con la asunción del presidente Mauricio Macri.
La iniciativa del Frente Renovador de Sergio Massa, motorizada por el cegetista Facundo Moyano, propone declarar la emergencia en materia ocupacional por el término de 180 días.
Esto implica que en ese período no puedan producirse despidos y que, en caso de verse afectado por alguna medida del empleador, el empleado pueda considerarse despedido y así cobrar doble indemnización.
El otro proyecto, más ambicioso, es impulsado por el jefe del bloque kirchnerista, Héctor Recalde, y su par Abel Furlán, sindicalista de la Unión Obrera Metalúrgica (OUM) de La Matanza.
En este caso, los diputados pidieron declarar la emergencia laboral por un año, período que podría ser prorrogado por el Poder Ejecutivo Nacional por el mismo plazo.
La propuesta prohíbe “los despidos o cesantías sin justa causa dispuestos por los empleadores, sean estos de carácter público como privado, en todo el territorio de la República Argentina”.
Al igual que el massismo, los diputados del Frente para la Victoria contemplan la doble indemnización en el caso de que el empleador incumpla con lo dispuesto en la ley.
En los casos de vencimiento del plazo de los contratos, se fija que los mismos serán renovados automáticamente hasta la fecha de caducidad de la emergencia laboral, salvo que se alegara justa causa para su no renovación.
Por último, el proyecto del kirchnerismo crea una comisión bicameral de seguimiento para “controlar, verificar y dictaminar sobre lo actuado por el Poder Ejecutivo” en este tema.
