Tras las fuertes críticas de la diputada de Cambiemos, el presidente la convocó a la residencia presidencial para analizar con ella sus dichos.
“Fue una reunión dura, franca y muy divertida, excelente. Cambiemos es una fuerza que debate todos los temas”, expresó Elisa Carrió al cabo de su día de furia, que terminó en la residencia presidencial, luego de alterar las redes sociales con un tuit muy crítico para el Gobierno, por los tarifazos previstos para el mes de abril.
La diputada nacional fue recibida por el presidente Mauricio Macri, que la convocó para hablar personalmente de sus dichos. Estuvo presente el otro pilar que dio lugar a la alianza Cambiemos, el expresidente del radicalismo Ernesto Sanz, y según se informó, allí debatieron sobre “todos los temas”.
La reunión de este miércoles por la tarde se extendió por casi una hora y media, antes de que el presidente partiera hacia Estados Unidos, y tuvo por objeto cortar por lo sano y bajar los decibeles de conflicto que parecía vislumbrarse en la fuerza a partir de que Carrió comenzara su raíd mediático plagado de críticas hacia el Gobierno.
En ese marco, según trascendió, el primer mandatario pidió bajar el perfil de la tensión. Según difundió la agencia oficial Télam, una fuente oficial señaló que “Lilita tiene que entender que hay procesos y estas cosas van a pasar, no se puede llegar a los objetivos si no se pasa por este momento”.
Asimismo se deslizó que al presidente lo molestan las críticas de Carrió, que no son gratuitas. “Ella respalda dos o tres medidas pero después golpea con lo que a la oposición le gusta más pegarle al Gobierno”, se expresó, aclarándose que Daniel Angelici “no es operador judicial”, advirtiendo que esa condición corresponde a alguien “desconocido”, no al presidente del club más importante del país.
Empero, se aclaró que de ningún modo se piensa en romper la alianza y, por el contrario, se piensa en Carrió como candidata de Cambiemos para las próximas elecciones legislativas.
Por la mañana, Elisa Carrió criticó con dureza el aumento en las tarifas de servicios públicos que surgirán de la quita de subsidios. "No comparto ajustes brutales de agua, gas, transporte en medio de tan alta inflación. No se puede ahogar a la sociedad que nos apoya en el cambio", tuiteó la socia fundadora de la alianza oficialista Cambiemos.
Y agregó: "Es cierto que hay que salir de los subsidios pero no de ésta forma, sin pensar en la sociedad que el solo título del aumento la angustia". En Capital Federal y el conurbano bonaerense, el agua aumentará entre 300 y 500 por ciento, los trenes lo harán un 150 por ciento mientras que los colectivos subirán un 70 por ciento, aproximadamente.
Además, contó que hizo "todo lo posible" para frenar los aumentos, pero que no lo logró. "Hice todo lo posible para pararlo. No pude", remató.