En el marco del XV Encuentro de la Secretaría Latinoamericana de la Vivienda y el Hábitat Popular (SELVIHP), la diputada provincial Alicia Sánchez, recibió en el salón auditorio del Edificio Anexo de la Honorable Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires, a delegaciones latinoamericanas, para desarrollar la Jornada sobre la Ley de Acceso Justo al Hábitat: Balance de lo realizado y desafíos futuros.

Del evento participaron los diputados provinciales Walter Abarca; Valeria Amendolara; Mauricio Barrientos; la presidenta de la Comisión de Tierras y Organización Territorial, Alicia Sánchez (coautora de la ley 14.449) y el responsable de la Federación de Cooperativas Autogestionadas MOI-Argentina, Néstor Jeifetz.

En el acto de apertura la diputada provincial Alicia Sánchez, señaló que “hay un importante déficit de viviendas adecuadas”, y en este sentido “la Ley 14.449 de Acceso Justo al Hábitat, vino para ser utilizada y para cambiar esta situación”.

“Es muy importante que los estados municipales adhieran a la ley”, sostuvo. Como dice uno de sus artículos, “cuando el propietario de una tierra quiere construir un mega emprendimiento -como ser un country o un supermercado- tiene la obligación de contribuir al fisco, tanto para la compra de tierras como para la construcción de viviendas populares”. Y agregó: “este impuesto debe ir al municipio a través de la creación de una cuenta especial. Obviamente, el compromiso político está implícito. El intendente tiene que comprometerse con la causa sino es imposible llevar adelante la ley”.

Por otro lado, afirmó que: “la ley habla de la creación de un Fondo fiduciario, que se financia con el aumento de un 50% sobre el impuesto inmobiliario de los baldíos urbanos”. Con esta carga se crea un sistema de “micro créditos para la mejora del hábitat de sectores populares. Esto es muy importante porque hay un millón de hogares deficitarios que son recuperables”.

También remarcó la posibilidad real de hacer una reforma a la ley: “Ya presentamos el proyecto. La modificación consiste en aumentar el impuesto al baldío -que va al fondo fiduciario- en un 30%. Este fondo es para pagar las expropiaciones y la compra de tierras para la producción de suelo urbano”.

Esta reforma permite “que los compañeros de estos barrios puedan ir pagando su tierra, tengan su titulo y dejar de ser ilegales. Esta ley vino a traer más dignidad, más inclusión y a reparar esta cuestión”, aseguró la legisladora.

También hizo referencia a uno de los principios rectores de la ley: “Cuando hablamos del derecho a la ciudad y a la vivienda, hablamos de tener los servicios básicos, como: cloacas, agua potable, gas, de tener acceso a la cultura, de compartir los espacios verdes, los espacios públicos. Sabemos que uno de los principales derechos que tiene el ser humano es tener un espacio donde desarrollar su proyecto de vida”.

Por su parte, el diputado Walter Abarca, señaló que “el hábitat es uno de los temas centrales en las políticas de los estados (…) Tenemos que poner al desarrollo humano y al hombre en el centro de la escena para la discusión de políticas públicas. Sin políticas de vivienda no podemos tener políticas de salud porque un ser humano que no tenga las condiciones de confort y de dignidad, difícilmente podamos trazar una política de prevención de salud”. “Tenemos mucho camino por desandar por eso la importancia de estos encuentros, de estas discusiones”, agregó.

Asimismo, la diputada provincial Valeria Amendolara afirmó que “esperamos que esta ley realmente se haga carne, tenemos que lograr que sea efectiva esta posibilidad de tierra, techo, vivienda y hábitat digno para cada uno de los habitantes de nuestra querida patria”.

Finalmente, el responsable de la Federación de Cooperativas Auto-gestionadas MOI- Argentina, Néstor Jeifetz, hizo referencia a los tres ejes fundamentes de la SELVIHP: el primero es una definición política, en repudio a las políticas neoliberales; el segundo eje: la reivindicación de la Autogestión: en el marco de una lógica no-empresarial. Y el tercer eje: se compone con organizaciones de base. Además explicó: “Hábitat como medio de uso, no de intercambio lucrativo. La lógica autogestionaria también implica una lógica participativa que es antagónica a la lógica de la producción empresarial, donde el hábitat es un negocio. La producción autogestionaria no existe sin la participación plena de cada uno de los seres humanos articulados consciente y colectivamente. El hábitat se gesta y lo que uno gesta es lo que uno ama. La vivienda nace en un espacio colectivo”.