En el supuesto caso de que el Gobierno disponga la medida, la diputada porteña podría estar al frente de la intervención en la entidad futbolística. Desde su entorno sostienen que “es un ruido para asustar a Hugo Moyano”.
El aval de la jueza federal María Servini de Cubría a la Inspección General de Justicia (IGJ), para que evalúe una posible intervención en la Asociación del Fútbol Argentino, hizo estallar las diferencias entre los dos bandos de dirigentes que comandan la entidad y que se disputan por la creación de una Súper Liga.
El Gobierno nacional recibió la advertencia, sobre el costo político que la medida traería, por parte del presidente de Independiente, Hugo Moyano, quien aseguró que “se para el fútbol”, ya que la intervención provocaría que el fútbol argentino quede fuera de toda competencia internacional.
En las últimas horas se conoció que uno de los nombres que suena para hacerse cargo de la intervención es el de Graciela Ocaña. Sin embargo, fuentes cercanas a la legisladora porteña sostuvieron a parlamentario.com que hay “hermetismo” sobre el tema, por parte de su propia protagonista, y que el rumor “es un ruido para asustar a Moyano”.
En caso de concretarse la intervención, no sería nada raro que Ocaña asuma como interventora. La “Hormiguita” es una aliada del oficialismo y fue denunciante en la causa que investiga presuntos delitos en el manejo de fondos millonarios destinados al “Fútbol para Todos”.
Por la causa fueron llamados a indagatoria los tres ex jefes de gabinete Aníbal Fernández, Jorge Capitanich y Juan Manuel Abal Medina, así como también varios dirigentes de la AFA, entre ellos el el actual presidente, Luis Segura.
