Arribas y Majdalani se defendieron de las impugnaciones y recibieron el respaldo de senadores de la oposición: “Fuimos hostigados por la prensa desde el día de nuestro nombramiento”. Aseguraron que su objetivo es “combatir el narcotráfico y el terrorismo, que están de la mano del lavado de dinero".
Con siete meses de retraso, el director y la subdirectora de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Gustavo Arribas y Silvia Majdalani, se presentaron ante la Comisión de Acuerdos del Senado, que tras una reunión de casi dos horas y media emitió dictamen favorable a sus respectivos pliegos.
Los funcionarios nombrados por el presidente Macri en diciembre pasado estuvieron a la defensiva durante gran parte de su presentación ante la comisión, con mayoría de la oposición. Aun así, obtuvieron el apoyo de nueve senadores del oficialismo y del PJ-FpV, por lo que ahora solo les resta el acuerdo del pleno para ejercer sus cargos con aval parlamentario.
Primero defendieron los lineamientos y objetivos del plan de inteligencia nacional previsto para el período 2016-2017. “Logramos reunir a todos los organismos que integran el Sistema Nacional de Inteligencia a fin de consensuar objetivos”, señaló Arribas, completado luego por la subdirectora: “El objetivo de la AFI es combatir el narcotráfico y el terrorismo, que están de la mano del lavado de dinero”, afirmó Majdalani.
A la defensiva
Pero la presentación se centró en gran medida en las impugnaciones y denuncias que pesan en su contra. Una de ellas corresponde a Iniciativa Ciudadana para el Control del Sistema de Inteligencia (Iccsi), un grupo que integran el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), la Asociación por los Derechos Civiles (ADC), Fundación Vía Libre, Instituto Latinoamericano de Seguridad y Democracia (Ilsed) y Núcleo de Estudios sobre Gobierno y Seguridad (UMET).
Las objeciones contra Arribas y Majdalani apuntan tanto a sus siete meses de gestión, como a sus trayectorias públicas antes de asumir en el organismo de espías del Estado. En relación a lo primero, las críticas se concentran en la falta de transparencia en el manejo de fondos y en las designaciones de personal vinculado con la ex SIDE.
En cuanto a las trayectorias de los candidatos, la impugnación cuestiona a Arribas por su falta de experiencia para ocupar el cargo, por omisiones en el currículum y por su participación en negociaciones denunciadas como sospechosas en la compraventa de jugadores de fútbol.
“El presidente considera que tengo la capacidad de desarrollar un buen trabajo en la Agencia”, se atajó Arribas, tras ser interrogado por el senador kirchnerista Ruperto Godoy (San Juan).
Las críticas a Majdalani, en tanto, versan sobre “la falta de resultados y la más absoluta falta de transparencia” de la Comisión Bicameral que controla a los organismos de inteligencia durante el tiempo en que ejerció su vicepresidencia, sumado a las denuncias del legislador porteño Gustavo Vera por presunto lavado de activos, entre otras causas que datan de 2004 y 2006.
“En las causas que se me imputan he sido sobreseída por inexistencia de delito”, se defendió “La Turca”, conocida como vieja amiga del expresidente y actual senador Carlos Menem y a quien se le atribuyen estrechos vínculos con Francisco Larcher, subsecretario de Inteligencia entre 2011 y 2014.
Como si estuvieran sentados en el banquillo de los acusados, y atento a las históricas denuncias que pesan sobre el mundo de los espías, los funcionarios prometieron mantener el trabajo de la AFI en la legalidad. “Nuestra gestión va a ser estrictamente marcada por la ley”, prometió Arribas.
Molesta por esta situación, Majdalani afirmó: “Fuimos hostigados por la prensa desde el día de nuestro nombramiento”. Su defensa continuará en un descargo que ambos deberán presentar por escrito a la comisión que preside el salteño Rodolfo Urtubey (PJ-FpV). A la espera de esas respuestas, los senadores del Frente para la Victoria Juan Manuel Abal Medina, Ruperto Godoy y Mario Pais no firmaron los dictámenes.
Nueva ley
Como era de esperar, los funcionarios también se refirieron a la posibilidad de impulsar una modificación a la última Ley de Inteligencia, sancionada por el Congreso en febrero de 2015 por iniciativa de la expresidenta Cristina Kirchner, luego de la restructuración del área de espías del Estado que comenzó en diciembre de 2014 y tras la muerte del fiscal Alberto Nisman en enero de 2015.
“Nos hemos planteado tomar un poco más de tiempo para definir los puntos a modificar”, contestó Majdalani ante la pregunta puntual de la senadora Sigrid Kunath.
En otro orden, tras ser consultado por el jefe de los senadores del PJ-FpV, Miguel Pichetto, Arribas señaló que la AFI tendría un papel importante en el caso de que Argentina aceptara refugiados. “Tenemos muchas cosas que hacer en materia de migraciones, como la creación de una policía migratoria”, afirmó el director.
El acuerdo parlamentario para los nombramientos en la AFI fue un requisito que introdujo la nueva Ley de Inteligencia.
Así, se espera que la alianza oficialista Cambiemos obtenga el respaldo de la oposición, con mayoría en la Cámara, para respaldar las designaciones de Macri. Fuentes parlamentarias admitieron la posibilidad de que el acuerdo a Arribas y a Majdalani sea otorgado durante la sesión del 10 de agosto.
