El funcionario, que había sido suspendido por la Justicia, finalmente presentó su carta de renuncia a las autoridades del Partido Justicialista, el partido opositor que debe conducir la Auditoría General de la Nación. Lo reemplazaría el exauditor peronista Oscar Lamberto.
El suspendido presidente de la Auditoría General de la Nación (AGN), Ricardo Echegaray, presentó su renuncia al frente del máximo organismo de control del Estado, que depende del Congreso. Oscar Lamberto ya suena como su posible reemplazo.
La carta de renuncia fue dirigida al presidente del Partido Justicialista, el diputado nacional José Luis Gioja, y en ella el exfuncionario advierte que el partido tiene allanada la “posibilidad de gestionar un reemplazo en el cargo”.
Al PJ le corresponde la decisión de nombrar al titular de la AGN por ser el principal partido opositor del Congreso.
En la misiva el extitular de la AFIP advierte que “habida cuenta que las cuestiones sobre las que estoy rindiendo cuentas en la justicia federal, insumen tiempos prolongados para su decisión de forma esclarecedora, que pueden incidir temporalmente en mi gestión al frente de la A.G.N.”
Sobre el final, agradece al Partido Justicialista “por el voto de confianza que me confirieron para el ejercicio de este cargo”.
El candidato que más suena para asumir en su reemplazo es Oscar Lamberto, quien fuera diputado nacional y auditor peronista y es bien visto por el sector del peronismo más alejado del kirchnerismo.
