En lo que puede leerse como una muestra más de independencia respecto al gobierno de Mauricio Macri, la diputada Elisa Carrió recibió en su casa a Juan José Gómez Centurión, desplazado de la conducción de la Aduana por decisión del presidente ante un presunto caso de coimas.

“Lilita” -una de las fundadoras de Cambiemos- calificó la reunión como “satisfactoria” y prometió un “informe” sobre el caso. Así, volvió a mostrar su autonomía respecto de sus socios del oficialismo, tal como lo hizo cuando le reclamó explicaciones a Macri por destaparse el escándalo de los Panamá Papers.

Desde el entorno de la diputada explicaron que la reunión se realizó por iniciativa propia y fue “de carácter informativo”.

Indicaron que se habló de los hechos de corrupción que lo involucrarían -fueron denunciados a través de un anónimo- y “se le pidió precisiones sobre la investigación que la Coalición Cívica lleva adelante desde el mismo día de los hechos”.

Desde que se conoció la noticia, trascendieron versiones de que la denuncia habría sido impulsada desde el propio Gobierno: algunos apuntan a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y otros a la vicejefa de la Agencia de Inteligencia (ex SIDE), Silvia Majdalani.

“Así como fue correcta la separación preventiva del cargo, es correcto defender la verdad y el honor del funcionario. Yo que estoy acostumbrada a quedarme sola junto con los míos durante muchos años frente a una denuncia, tengo el deber de no dejar solo a Gómez Centurión”, dijo Carrió.

“Esto se lleva adelante en el convencimiento de que quienes quisieron cambiar la Aduana, que es el lugar de mayor fraude en el país, se encontraron con la muerte como fue el caso del Brigadier Etchegoyen o con un fusilamiento mediático anticipado y teniendo conocimiento que hay funcionarios de la Aduana que son a la vez parte de los servicios de inteligencia, me pareció imprescindible escuchar sus palabras precisas frente a las preguntas sobre nuestra investigación”, agregó la líder de la Coalición Cívica.

Y anticipó que publicará un informe sobre la situación de la Aduana que entregará a la Justicia.

Por último, Carrió sostuvo que “en la confianza de que es un hombre honesto, de que ha arriesgado su vida en nombre de la Patria y que fue reconocido con la Cruz de Heroico Valor en combate, está reunión no sólo era un deber moral, sino también una necesidad política porque lo contrario sería entregar la Aduana a los que robaron millones y millones de dólares a lo largo del tiempo. Fue preciso en su explicación y se explayó en cuál era la relación con Carlos Oldemar Barreiro Laborda (empresario paraguayo, ex dueño de LoJack) y de dónde provenía”.