Las diputadas Conti y Gaillard impulsarán la modificación del artículo quince de la ley 23.737 (de estupefacientes), a fin de incorporar una excepción sobre la tenencia y consumo de plantas Cannabis Sativa, prescribiendo que no se considere tenencia o consumo ilegal cuando su destino sea para práctica medicinal y/o cuidados paliativos en las personas que padezcan enfermedades como cáncer, esclerosis múltiple y epilepsia refractaria, entre otras.

La última semana se firmaron dos dictámenes en el plenario de comisiones que pretenden modificar la ley de estupefacientes, en cuanto al tratamiento de la legislación de los precursores químicos. Se acordó asimismo ver la posibilidad de incluir en el recinto modificaciones que optimicen las normas preventivas y que sean acordes para el mejor trabajo en la lucha real contra el narcotráfico.

Es en dicho sentido que ambas diputadas insistirán en la modificación del artículo 15. El actual artículo habilita el famoso coqueo, que al momento de sancionarse tuvo sus razones de ser en la raigambre cultural de algunas provincias donde ya el mismo era práctica común en las comunidades, sin que esta fuera percibida como la comisión de un delito. Todo lo contrario, resguardaban su estado fisiológico como su salud, se vislumbraban entonces los efectos medicinales que producían, ya sea masticando o como infusión, las hojas de coca.

La intención de esta incorporación a la media sanción venida del Senado se dirige en el mismo sentido, destacando que los avances científicos médicos respecto del cannabis, en su estado natural o cualquiera de sus derivados como medicina dan por sentado los resultados positivos que la misma produce en situaciones extremas, resaltando que es una cuestión de derechos humanos hacer lugar a la posibilidad de que una persona que padece una enfermedad -terminal o crónica- tenga las reales posibilidades de sobrellevarla de la mejor manera posible, debiendo el Estado dar una respuesta para atender esa necesidad.