“Los trabajadores legislativos fuimos los primeros en sufrir las políticas de ajuste de este Gobierno pero resistimos con unidad y solidaridad”, expresó el secretario general de la agrupación sindical, Claudio Britos.
La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) del Congreso fue parte de la marcha federal que tuvo su cierre el viernes pasado en la Plaza de Mayo, convocada por organizaciones sindicales, políticas, movimientos sociales y de derechos humanos para rechazar la política económica del gobierno de Mauricio Macri.
La columna de más de 300 trabajadores legislativos partió desde el Palacio Legislativo Nacional hasta el Obelisco.
“Los trabajadores legislativos fuimos los primeros en sufrir las políticas de ajuste de este Gobierno pero resistimos con unidad y solidaridad”, expresó al respecto el secretario general de ATE-Congreso, Claudio Britos. Y agregó que “nos estigmatizaron a través de los medios de comunicación y les respondimos con más trabajo. Estamos organizados para defender nuestros derechos”.
La decisión de marchar se había tomado una semana antes en un plenario de delegados y afiliados. Una de las razones que esgrimió la Junta Interna de ATE-Congreso para ser parte de la marcha fue que el trabajador del Congreso Nacional fue “el primer sector que sufrió las consecuencias la política de achicamiento del Estado por parte del actual Gobierno”.
Sin embargo, “mediante el trabajo, el diálogo y el consenso, ATE-Congreso, UPCN-Congreso y APL, lograron reincorporar 1.800 compañeros a sus lugares de trabajo”, expresó Britos.
Con una asistencia que colmó la Plaza de Mayo y las zonas aledañas, la marcha mostró a un sindicalismo unido bajo la principal consigna: “Contra el tarifazo, los despidos y el ajuste”. La movilización contó con el apoyo y participación de las dos corrientes de la CTA, ATE, la Corriente Federal de los Trabajadores y algunos de la CGT, entre ellos Camioneros, Bancarios, la UOCRA capital y los trabajadores ladrilleros.
