Aquella exploración de nuevos rumbos y alianzas esbozados por sectores de Cambiemos para modificar la relación que en la provincia de Buenos Aires mantiene la gobernadora María Eugenia Vidal con el Frente Renovador, quedó sepultada por la realidad. Este jueves se confirmó esa situación, al reunirse la gobernadora María Eugenia Vidal con el diputado nacional Sergio Massa en el hotel Four Seasons, antes de concurrir a la presentación de la Mesa Nacional de Cambiemos.

En el marco de un almuerzo compartido, Vidal dialogó con Massa en torno al Presupuesto 2017, para el que necesita de los votos del Frente Renovador. Según trascendió, quedaron en revisar algunos puntos del proyecto, con el fin de introducir modificaciones, con vistas a su aprobación en las próximas semanas.

Se habló también del tema seguridad en la provincia de Buenos Aires, abordándose las últimas novedades en la materia, descabezamiento del Servicio Penitenciario incluido.

El encuentro no fue a solas, sino que estuvieron el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y el presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, ambos de diálogo directo y continuo con el tigrense. Se dice que Massa le pidió a la gobernadora apoyo para los proyectos que impulsa en materia de seguridad, tales como el de protección a la víctima o la limitación a las excarcelaciones, coloquialmente llamadas “puerta giratoria”.

Quedaron en conversar en torno a las autoridades de la Legislatura bonaerense, donde fue puesto el año pasado el massista Jorge Sarghini, y según el acuerdo para 2017 correspondería ese lugar al macrista Manuel Mosca, actual vicepresidente del Cuerpo.