Los jueces de la Cámara Nacional Electoral expusieron junto a especialistas ante el plenario de comisiones que analiza la reforma del sistema de votación. Servini De Cubría pidió aplicarla de manera gradual. El debate continuará el martes.
El Senado retomó este jueves el debate por la boleta electrónica con la presencia de los jueces de la Cámara Nacional Electoral (CNE), Alberto Dalla Via y Hernán Corcuera, quienes acompañaron la actualización del sistema de votación pero advirtieron sobre la importancia de los controles.
La segunda jornada de debate sobre el proyecto del Poder Ejecutivo se desarrolló en un plenario de las comisiones de Asuntos Constitucionales, Justicia y Asuntos Penales, y Presupuesto, en el Salón de las Provincias.
En ese marco también expusieron jueces y fiscales electorales, académicos y especialistas en informática, tal como se produjo en la Cámara de Diputados.
Al iniciar el encuentro, Dalla Via y Corcuera se manifestaron a favor de la incorporación de tecnología en el proceso electoral pero advirtieron que la implementación debe ser “correcta” y tener un amplio control.
“Desde el año 2005 la Cámara Nacional Electoral viene pidiendo que se abra un debate sobre la forma de votar”, comenzó Dalla Via, quien consideró que el sistema de votación “tradicional” ya “dio todo lo que nos podía dar”.
El magistrado enfatizó: “Es irrenunciable para nosotros el ejercicio del control”, a fin de que “se cumpla con el debido proceso electoral”. Y sostuvo que es necesario realizar una auditoria previa, una concomitante y una posterior.
Dalla Via señaló que “sería un salto peligroso incorporar tecnología” y no adecuar los recursos tecnológicos y dar la información correspondiente.
Opinó que está “muy bien que en el Congreso se debata un cambio del sistema de votación que sea más amigable para los ciudadanos”, pero “en la medida” que no atente contra las garantías del proceso electoral. Y calificó como un “error” el “creer que la incorporación de tecnología es más transparente”.
Por su parte, Corcuera recordó que “este es un debate que proponíamos desde hace muchos años”. Al igual que su par, pidió “prestar mucha atención a la incorporación de tecnología”, la cual “tiene que ser asegurada y tener muchas instancias de revisión por todos los sectores”.
A continuación expuso la jueza federal María Romilda Servini de Cubría, quien sostuvo que la incorporación de tecnología “es positiva”, pero opinó que la implementación tiene que ser “en forma gradual” y “con anticipación” porque “a último momento no se puede aplicar”.
También alertó sobre el riesgo de “enseñar de golpe a toda la población” el nuevo sistema de votación y, sobre todo “a la población pobre, que no entienden el sistema electrónico”.
“Si esta ley la quieren aplicar en las elecciones del año que viene, la tienen que aprobar rápido”, recomendó la jueza con competencia en materia electoral en la Capital Federal.
En tanto, el exdirector nacional electoral Alejandro Tullio, sugirió aprobar un “plan B” ante el peligro de que las auditorías previas determinen que el nuevo sistema no es confiable.
“La posibilidad de un sistema alternativo es imprescindible. Si de las auditorías surge que no se puede aplicar algo, tiene que haber un mecanismo alternativo”, explicó Tullio ante los senadores.
La especialista Delia Ferreira Rubio señaló que “el voto electrónico puede evitar algunas irregularidades, pero eso mismo se logra más barato con la boleta única papel”, y añadió que “de los veinte países más desarrollados del mundo, sólo uno usa el voto electrónico”.
Jorge Di Lello, fiscal electoral, aportó que “hay que armonizar los delitos y faltas contempladas en el proyecto con los previstos en el Código Penal”.
A su turno se manifestó Mario Mazzitelli, apoderado del Partido Socialista Auténtico, quien expresó que “no tendríamos por qué tener desconfianza” del soporte electrónico.
“Nosotros podemos dar testimonio que los partidos pequeños tenemos problemas desde el arranque, cuando no tenemos dinero para imprimir las boletas”, comentó
La iniciativa, que ya cuenta con media sanción de Diputados, fue defendida el martes pasado por el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, y el secretario de Asuntos Políticos, Adrián Pérez, en una reunión donde también expusieron apoderados de los partidos políticos.
El proyecto propone reemplazar la boleta partidaria de papel por un sistema de boleta electrónica similar a los que funcionan en la Ciudad de Buenos Aires y de Salta.
Además, tanto en las PASO como en las elecciones generales, las listas deberán estar integradas, de manera intercalada, por igual cantidad de hombres y de mujeres.
Otra de las modificaciones a la ley actual es que el Ejecutivo le cederá a la Cámara Nacional Electoral el control del escrutinio provisorio.
El texto aprobado en Diputados no prevé cambios en las PASO, por lo que el votante podrá combinar en esa instancia candidatos de distintas fuerzas políticas por rubro.
