A contrarreloj para tratar el tema en el recinto, la reforma electoral sigue sujeta a debate en la Cámara alta. Este martes, el plenario de las comisiones de Asuntos Constitucionales, Justicia y Asuntos Penales, Presupuesto, y Banca de la Mujer, retomó la discusión y según la intención del kirchnerismo, seguirá dilatándose su tratamiento. Pasa que se pretende continuar el debate este jueves y el martes de la semana que viene.

El oficialismo, en tanto, quiere que este jueves se firme dictamen, de modo tal de no seguir dilatando su tratamiento en el recinto. Por otraparte, es casi un hecho que el proyecto sufrirá cambios en el Senado, impulsados por la oposición, y volverá a la Cámara de Diputados para su sanción definitiva, que podría ser en prórroga de sesiones ordinarias o bien en una convocatoria a extraordinarias por parte del Poder Ejecutivo.

Por lo pronto, con la participación de especialistas e invitados por los senadores, el debate en el plenario de comisiones continuó este martes. El primero en exponer este martes fue el presidente y CEO del Grupo MSA, Sergio Angelini, quien aseguró que el “problema” en el sistema de votación no radica en la incorporación de tecnología sino que “la discrecionalidad” está en el “conteo de votos y el escrutinio de mesas”.

El empresario, desarrollador del nuevo mecanismo, advirtió en más de una oportunidad que la implementación de la Boleta Única Electrónica debe realizarse progresivamente.

Por el contrario, el constitucionalista Eduardo Barcesat dijo que “existen elementos constitucionales para descalificar el voto electrónico”, ya que puede “afectar tanto el valor de universalidad como el valor de obligatoriedad”, ambos “consagrados en la Constitución Nacional”.

“Es un sistema que genera dificultades, y en esta medida afecta los valores”, señaló y mencionó que el voto “puede dejar de ser secreto si permite luego detectar qué es lo que se ha votado”. “El cuarto oscuro es una conquista de la democracia, que no debe ser perdida”, agregó.

A su turno, Claudio Bargach, coordinador nacional de la Red Ser Fiscal, resaltó que “hay que evaluar” un cambio porque “hay un sinnúmero de provincias que ya han experimentados mecanismos alternativos a la boleta de papel”.

Pidió que en caso de aplicarse, el sistema esté “en manos del Estado” y que el privado sólo “puede asistir”. También, solicitó “darle previsibilidad de tiempo a los votantes”.