El gobierno de Mauricio Macri se encuentra literalmente a la deriva. Con un rumbo que ya fracasó y sin plan “B” se debate intensamente por buscar un horizonte que les permita llegar, decorosamente a las elecciones de medio término.

Política Exterior: por primera vez en su historia Argentina subordinó su política exterior a la posibilidad de lograr un cargo en la ONU. La canciller Malcorra realizó una costosa campaña, que pagó el pueblo argentino, por lograr, sin éxito, la Secretaría General de Naciones Unidas. En su campaña se cometieron tres errores garrafales para los intereses del país. A) Se apoyó incondicionalmente a Hillary Clinton y al Partido Demócrata en las elecciones de Estados Unidos con el final ya conocido, B) Se firmó un vergonzoso acuerdo con Inglaterra, que compromete la soberanía argentina sobre gas petróleo y recursos naturales. C) Se desplazó a la Argentina del Mercosur hacia la Alianza del Pacifico, hoy en crisis, al afirmar Trump que revisará los tratados de Libre Comercio con esa región.

Política Económica: Alfonso Prat Gay y su equipo, comenzaron el año diciendo que a) La inflación sería del 20 a 25% b) Argentina crecería el 1% c) Se bajaría el Déficit Fiscal. Resultados: La inflación superar el 40% en el año, La economía argentina caerá el 3% o más, d) aumentaron el 200% el Déficit Fiscal. Además el mejor equipo de los últimos 50 años endeudó el país en más de 46.000 millones de dólares, generaron 1.500.000 pobres, 300.000 nuevos desempleados y caída de la Industria de en un 7%, pese al record mundial de endeudamiento no logran reactivar la Economía, y seguimos esperando la lluvia de inversiones.

Política Social: es absolutamente intrascendente y se reduce a aumentar becas y salarios sociales; por suerte para el país no innovaron absolutamente en nada y destinan una parte ínfima, comparada con los impuestos que derogaron para mineras y exportadores de granos, del presupuesto a sostener la paz social.

Obras Públicas: otro fracaso estrepitoso. Solo se ejecutaría el 65% del presupuesto destinado a Infraestructura. De las políticas de Salud, Medio Ambiente, Producción, Agroindustria etc., son imposibles de analizar por inexistentes.

La desorientación de “Cambiemos” es absoluta, no pueden sostener en agenda los objetivos de gobierno que dicen tener; esta semana comenzó con el jefe de Gabinete diciendo: A) Que el impuesto a las Ganancias se trataría el año próximo, pero sus efectos serían retroactivos a enero, B) Que de aprobarse la Emergencia Social sería vetada por el presidente Macri al igual que la ley antidespidos, y C) Que se aprobaría en sesiones extraordinarias la reforma electoral y el voto electrónico. El jueves, cuarto día hábil de la semana, no quedó en pie una de esas afirmaciones; Ganancias se tratará en extraordinarias y sus legisladores darán quórum; aprobarán la ley de Emergencia Social y sus diputados votarán a favor. Una reunión en el Senado, de la que participó Horacio Rey en representación del gobernador Peppo, dinamitó cualquier posibilidad de reforma electoral.

Ante un gobierno sin norte, con ministros incapaces de lograr los objetivos que ellos mismos declaran tener, algunos analista ya hablan de inminentes cambios en el Gabinete Nacional, otros de ampliar la coalición de gobierno. Sin logros que mostrar, el Gobierno Nacional se defiende recurriendo, discursivamente a la Pesada Herencia, económicamente a un endeudamiento que nos conducirá a un desastre y políticamente firmando rendiciones incondicionales ante la oposición parlamentaria y los movimientos sociales.