El organismo le recomendó abstenerse de utilizar estereotipos como el que usó contra su hoy colega legisladora, quien a su vez sostuvo que el dictamen “sirve para visibilizar la discriminación que hoy que aún existe por el hecho de ser mujeres”.
“Si quiere salir en los diarios, que se ponga plumas, se vista de algo, grite. No porque además después dice que la están persiguiendo. Nada, que hable en francés, pero esto no, no hay lugar”, afirmó el entonces ministro de Economía Axel Kicillof en declaraciones radiales el 16 de septiembre del año pasado, en plena campaña electoral. Lo hizo porque la diputada había hecho una presentación ante la Justicia para que el Gobierno informa estadísticas sobre pobreza. “Pobre, está en campaña y quiere salir en los diarios”, agregó el economista kirchnerista.
La diputada lo denunció ante el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI), que acaba de expedirse, recomendandole al hoy diputado que se abstenga de expresarse con estereotipos que “menoscaben” a las mujeres.
El dictamen determinó que “los términos de la expresión denunciada tienen tintes discriminatorios contra las mujeres y que apuntan a deslegitimar a la denunciante en cuanto a su actividad política, denotando que las mujeres, para llamar verdaderamente la atención, deben ataviarse como una vedette o realizar un escándalo mediático, pero no pueden hacerlo a través de sus acciones políticas concretas”.
El INADI entendió, además, que “los dichos del Sr. Kicillof identifican la posible notoriedad de una mujer con el escándalo mediático o la presunta sensualidad asociada con el atuendo del teatro de revista o el cabaret, relativizando entonces la valía intelectual y política que una mujer puede tener para ocupar determinados cargos o funciones”.
Al respecto la diputada Victoria Donda dijo que le parece “importante el dictamen del INADI, especialmente para poder visibilizar una situación que sufrimos todas las mujeres que ocupamos lugares de decisión que consiste en la discriminación e injuria por el sólo hecho de ser mujeres y que tiene la característica de ser un tipo de violencia silenciosa, solapada. Pero ello no es más que un reflejo de lo que viven todas las mujeres a diario en el trabajo y en sus relaciones interpersonales propias de la cultura machista que reproduce desigualdad y que genera violencia contra las mujeres”.
