El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, consideró “un triunfo que después de una década podamos ir eliminando las inequidades y las regresividades que se habían acumulado sobre el impuesto a las Ganancias”, y consideró que “logramos en consenso con los representantes de los trabajadores y con nuestros socios que son los gobernadores, con quienes compartimos en partes iguales la coparticipación de este impuesto, pudimos llegar a un acuerdo que es muy beneficioso para quellas familias argentinas que están alcanzadas”.

Asimismo celebró además “la señal que damos hacia afuera, porque logramos revertir una mala imagen ante los inversores, de un país donde aparentemente por un momento empezó a primar la irresponsabilidad, la demagogia, el populismo, y lo transformamos en una buena noticia, donde para los inversores la señal es clara: la mayor parte de la dirigencia en la Argentina es seria y apuesta a la gobernabilidad”.

En diálogo con el programa El fin de la metáfora, de Radio 10, Frigerio consideró que “hay que trabajar más sobre aquellos impuestos que impactan sobre la totalidad de la población y sobre todo los que menos tienen”. Citó el impuesto al trabajo, el IVA, y “otros impuestos que distorsionan la actividad económica, como Ingresos Brutos, el Impuesto al Cheque”.

Por eso anticipó que a partir de marzo “arranca la Comisión Bicameral de Reforma Tributaria, en donde vamos a ponernos a discutir seriamente una reforma integral de los impuestos en la Argentina”. El ministro señaló que en el país que heredó este Gobierno hay “una de las presiones impositivas de las más altas del mundo y más altas de nuestra historia, y lo que necesita la Argentina es alivio fiscal. El problema es que recibimos una presión tributaria enorme, pero además uno de los déficits fisales más altos de la historia, y por eso es que toda esta solución a estos problemas solo se puede hacer de manera gradual”.