Arrancó el año tendiendo puentes hacia el interior de la coalición gobernante que integra. No porque se hubieran caído, sino para aventar fantasmas en tiempo y forma. Fue seguramente luego de que su última carga judicial del año que concluyó, dirigida hacia el presidente de la Corte Suprema de Justicia, nada menos, generara incomodidad en el seno del Gobierno al punto tal de que el presidente de la Nación saliera a despegarse públicamente de esa denuncia contra Ricardo Lorenzetti.

Deseosa de cuidar las formas, y no es poco tratándose de ella, la presidente del bloque de diputados nacionales de la Coalición Cívica-ARI afirmó en el primer día hábil de 2017 que “mantengo una relación excelente con todo el Gobierno y no deseo verme involucrada en ninguna disputa interna”. Lo dijo a través de su cuenta de Facebook, en la que agregó que “desmiento en forma categórica cualquier desinteligencia con Mauricio Macri y el Gobierno y festejo las primeras Navidades y Año Nuevo con luz eléctrica de la última década”.

Carrió sostuvo que “por supuesto que tenemos discusiones con funcionarios del Gobierno nacional, pero todos los debates se dan en el marco de un gobierno de coalición, de la confianza política y el afecto personal”.

“No tengo apetencias personales, ni ambiciones de cargo alguno, mi disposición es estar en donde mejor le sirva a la construcción de la República y a Cambiemos”, concluyó Carrió.