José María Díaz Bancalari fue un hombre de peso indiscutido en el peronismo, pero de bajo perfil en el Congreso Nacional. De hecho, no solía hablar en las sesiones de la Cámara de Diputados. La última vez que lo hizo fue en octubre de 2014, durante un homenaje al exgobernador bonaerense Antonio Cafiero, fallecido hacía pocos días.

En aquella oportunidad, destacaba: “No por previsible deja de causarnos un inmenso dolor la pérdida de un dirigente ejemplar e inigualable como fue Antonio Cafiero: desde sus inicios, como el ministro más joven de la presidencia de Perón, hasta todos los cargos que ocupó”.

Díaz Bancalari rememoró en la sesión anécdotas del exmandatario provincial –a quien reconoció como un “amigo-. “Podríamos hablar de cómo reconstruyó el movimiento nacional justicialista o cómo rescató al peronismo luego de su derrota frente a la Unión Cívica Radical, en 1983. Desde ahí rescató el peronismo y lo llevó al triunfo en 1987 junto con el compañero (Luis) Macaya, también desaparecido”, recordaba.

“Cuando hubo que encontrar la forma de unificar a los peronistas, se buscó la figura de Cafiero. Cuando hubo que sumar alguna actitud digna, la figura de Cafiero era la que definía. Digámoslo con todas las letras: si alguien se opuso y discutió con todas sus fuerzas el tema de la Banelco, fue casualmente Antonio Cafiero”, aseguró entonces Díaz Bancalari.

Un año antes, en 2013, el dirigente fallecido este lunes se imponía como presidente del PJ bonaerense en un acto en La Matanza, acompañado por el entonces intendente Fernando Espinoza, relegando fuerte a la agrupación kirchnerista La Cámpora.

En otro de los últimos episodios públicos de Díaz Bancalari, en febrero de 2012, sufrió agresiones y golpes injustificados por parte de excombatientes de la guerra de Malvinas cuando se retiraba de un acto de la expresidenta Cristina Kirchner en Casa de Gobierno.