El jefe comunal de San Jorge reniega del sistema democrático y sostiene que los representantes del pueblo no están a la altura de las circunstancias sancionando penas más severas.
Polémico, el intendente de la localidad santafesina de San Jorge, Enrique Marucci, pidió nada menos que se cierre el Congreso de la Nación y la Legislatura provincial, por cuanto no se sancionan penas más duras contra la delincuencia. El funcionario pide aplicar una política de “garrote”.
En declaraciones al diario La Capital de Rosario, expresó una frase poco feliz: “si yo gobernara bajo otro régimen, a esto lo arreglo en dos patadas”, dijo, y agregó: “Pero con el sistema democrático que tenemos no lo vamos a arreglar nunca”.
“Garrote, garrote y garrote”, es el camino que a juicio de Marucci soluciona el tema. Poco democrático, sostuvo que “cerraría la Legislatura y el Congreso de la Nación porque no se ponen de acuerdo para modificar las leyes. Tienen problemas internos e ideologías muy diferentes para atender las necesidades actuales”.
Para el intendente de San Jorge, “hay que volver a algo duro porque si no los problemas los tenemos los ciudadanos”. Agregó que “si tenemos un Congreso que lo paga el pueblo, y que alberga a un montón de gente, que intenten ponerse de acuerdo alguna vez y dicten leyes duras y rígidas para que los delincuentes sean condenados”.
“Se les da mucha participación a los que defienden los derechos humanos. Antes ellos intervenían para atender a las víctimas y ahora lo hacen para sacar de la cárcel a los delincuentes. Lo digo por la impotencia que siento porque acá, y en todo el país, suceden hechos que no se resuelven”, concluyó.
