Los legisladores porteños aprobaron por unanimidad, en la sesión ordinaria de este jueves, una serie de modificaciones a la Ley 1.040, mediante la cual se estipula “la obligación de establecer las medidas que sean necesarias para capacitar al personal profesional y no profesional, adecuar los recursos físicos y la estructura organizativa” para cumplir con el derecho que tienen las embarazadas a ser acompañadas por una persona de su confianza personal durante el parto.

Según la propuesta de la CC ARI Paula Oliveto Lago, la medida se extenderá a “todos los efectores del sistema de salud, ya sea el subsector estatal, privado y de la seguridad social”. A su vez, incorporó un nuevo artículo en el cual se instituye que “el Ministerio de Salud debe impulsar campañas para difundir el contenido de la ley, ya sea mediante los medios de comunicación como a través de la provisión de difusión gráfica en los efectores del sistema, a los que se obliga a exhibirlo en un lugar visible en los sitios de atención al público” dado que “los servicios de salud tienen que informar a las personas de sus derechos y obligaciones”.

De esta manera, la ley establece que “el incumplimiento de las prescripciones de la norma por parte de los efectores de salud, del equipo de salud y de las instituciones en donde presten servicios, debe ser considerado falta grave sin perjuicio de la responsabilidad civil y / o penal que puedan corresponder”.
Al respecto, Oliveto Lago subrayó que “las etapas del embarazo, el proceso de parto y su atención hasta el nacimiento del bebe son momentos únicos; como legisladores debemos garantizar el efectivo cumplimiento de los derechos que cada mujer tiene” y añadió que “propiciarle Propiciarle tranquilidad y contención, son derechos garantizados incluso por nuestro sistema de salud”.

“El acompañamiento es fundamental para la contención y seguridad de cada mujer embarazada”, sentenció.