“Vemos un 2017 donde estamos convencidos que la Argentina va a crecer y que va a terminar de confirmar la salida de esta situación de estancamiento”, aseguró rotundamente el jefe de Gabinete, Marcos Peña, en el Senado, y expuso una serie de indicadores que, consideró, “hablan de una tendencia positiva”.

Consultado por Juan Manuel Abal Medina (PJ-FpV) acerca de la situación económica que atraviesa el país, el funcionario dijo que el oficialismo “comparte” la “preocupación” de la oposición. “Siempre hemos dicho que la transición económica que hemos planteado desde que asumimos iba a llevar una primera etapa más compleja, que fue el primer semestre del año pasado”, expresó.

Sostuvo que “debido a lo dañada que está la estructura económica” del país, quizás “no se sienta de la misma manera en cada lugar” la reactivación, pero afirmó que el Gobierno apuesta a “un crecimiento por los próximos 20 años”, focalizándose en “fortalecer la inversión y las exportaciones para generar un desarrollo más sustentable”.

Destacó que en el primer cuatrimestre del año la economía “creció en un 0,5 por ciento, confirmando la salida progresiva de la recesión”. “Las perspectivas de inversión se triplicaron el primer trimestre”, agregó y señaló que “creció un 11,6 por ciento la venta para materiales en la construcción en marzo”.

“En materia de consumo, hemos mejorado la expectativa en cuatro variables: crecimiento del salario real, baja de inflación, el programa de reparación histórica, el crecimiento en las prestaciones sociales y el aumento del crédito”, resaltó.

El jefe de Gabinete subrayó que “estos indicadores hablan de una tendencia muy positiva”. En esta línea, mencionó la suba en el patentamiento de motos y autos, y la venta con tarjetas. También informó que en lo que va de 2017 se incorporaron “87 mil trabajadores” formales.

“Sabemos que hay sectores con más complicaciones”, reconoció Peña, entre los que incluyó a las Pymes, pero prometió: “se va a seguir trabajando sector por sector para identificar a los que más necesitan. Por supuesto que debe haber un acompañamiento del Estado”.

Respecto a las tasas del Banco Central, explicó que el Gobierno tiende a “la construcción de una dependencia del BCRA, en el contexto de un tipo de cambio flotante como tenemos y de una definición de metas inflacionarias”. “Es un camino que requiere una gran disciplina”, añadió y detalló que “las metas inflacionarias que estimamos son de entre 12% y 17 % para este año, de 8% a 12 % para 2018 y de un 5 % para 2019”.

Más tarde, el ministro coordinador deslizó brevemente el reproche a la herencia recibida y disparó al PJ-FpV: “nos dejaron un país con un 30 por ciento de pobreza, sin generación de empleo y con problemas estructurales”.

Advirtió que Argentina “es el tercer país más cerrado del mundo” y que “no creció cerrándose”.

En tanto, ante una pregunta del senador Omar Perotti (PJ-FpV) sobre el mercado interno, el funcionario manifestó que “la primera señal es que no nos alcanza con el mercado interno. Siendo una de las economías más cerradas del mundo no vamos a lograr generar ni los puestos de trabajo que necesitamos, ni poder sustentar los puestos de trabajo que se generaron”. “Es un tema que requiere un acuerdo de hacia dónde vamos y el acompañamiento de sector por sector”, dijo y apostó a ayudar a las Pymes en su “internacionalización”.