Laura Machado se enfrentó con Alfredo Luenzo en el final de la reunión de la Comisión de Industria y Comercio, donde se trató una iniciativa distinta a la aprobada en Diputados.
Con un final abierto culminó este miércoles la reunión de la Comisión de Industria y Comercio del Senado, donde se puso en discusión el proyecto para modificar la Ley de Tarjetas.
En los últimos minutos del encuentro, la comisión ya no contaba con quórum: estaban presentes Alfredo Luenzo (Chubut Somos Todos), Laura Machado (Pro), Pamela Verasay (UCR) y Roberto Basualdo (Producción y Trabajo).
La discusión comenzó cuando la jefa del bloque Pro, Machado, pidió que se tome más tiempo para el dictamen y se suspenda la firma del despacho por la falta de quórum. Pero Luenzo, el presidente del cuerpo e impulsor de una nueva iniciativa a la aprobada por Diputados, afirmó que “varios senadores” habían firmado el texto antes de retirarse del Salón de las Provincias, por lo que “el dictamen está”.
Pese a los argumentos de Luenzo, la cordobesa insistió con la suspensión del despacho y reclamó: “los tres senadores que quedamos no queremos firmarlo”. Sin embargo, el chubutense no hizo lugar a su moción, y justificó: “no le voy a faltar el respeto a mis pares que firmaron”.
Fue entonces cuando Machado, con el tono de voz elevado, rogó que “quede en acta que el presidente de la comisión no quiere aplicar el reglamento”. La respuesta de Luenzo fue convocar a una reunión entre los senadores para resolver el altercado.
Anteriormente, Verasay había solicitado poder “sacar una ley viable” y “escuchar al Poder Ejecutivo”. En tanto, Basualdo también abogó por llegar a un consenso y tratar la ley sin “rapidez”.
Invitado a exponer, Norberto Etchegoyen, presidente de la Cámara de Emisores Regionales de Tarjetas de Crédito y Consumo no Bancarias de la Argentina, alertó sobre dos nuevos puntos del proyecto de ley.
“Los aspectos más negativos están en el plazo del pago, que se nos exige pagarle a los comercios antes que nosotros cobremos, y en la tasa de interés”, sostuvo y agregó: “La tarjeta de crédito es un servicio más para los bancos, pero para nosotros es la vida. Nos dejarían afuera del mercado con este proyecto”.
Por su parte, César Bastién, presidente de la Asociación de Tarjetas de Crédito, manifestó que “con los fundamentos de este proyecto están totalmente resentidos los bancarizados y los no bancarizados”.
