Al cumplirse el próximo 16 de diciembre un nuevo aniversario de La Noche de los Lápices, la diputada nacional Lucila De Ponti rindió homenaje a los desaparecidos en esa luctuosa jornada. “Muchos de nosotros comenzamos a militar en memoria de los desaparecidos de La Noche de los Lápices”, recordó, y reclamó en ese marco al Estado nacional la aparición con vida de Santiago Maldonado, reivindicándolo como un hombre que “se decidió a participar para una causa que consideraba justa, y hubo un Estado que decidió dejarlo de cuidar para secuestrarlo y desaparecerlo”.

De Ponti repudió ese hecho, “porque estamos convencidos que 41 años después nuestra sociedad ha logrado conquistar valores que tienen que ver con el Estado de Derecho y en los cuales no estamos dispuestos a retroceder”.

En el mismo sentido habló la diputada de izquierda Soledad Sosa, que consideró a los desaparecidos en La Noche de los Lápices como “la primera expresión de resistencia”, y reivindicó la lucha actual contra “un ajuste enorme que está descargando este Gobierno”. Así reivindicó las tomas de colegios “contra este plan perverso”, que consideró que pretende hacer “competir a los jóvenes en las pasantías contra sus propios padres”.

“Son la expresión de la defensa del sistema educativo; no se puede criminalizar esta lucha como está haciendo este Gobierno. Las escuelas son de los estudiantes, y ante este ajuste es lo más saludable que los estudiantes se levanten”, sostuvo Sosa, asegurando que “no queremos secundaria del futuro en ningún lugar de la Argentina”.

Tras considerar que el 16 de septiembre “es el 24 de marzo de la juventud”, remarcó que más del 30% de los desaparecidos fueron jóvenes, y luego señaló que “no se le puede pedir prudencia a la juventud en medio de una nueva desaparición como es la de Santiago Maldonado”.

Desde el oficialismo, la radical Brenda Austin consideró La Noche de los Lápices como “un hito para la juventud”, reivindicó la lucha de esos jóvenes por el boleto estudiantil, y que estimó que próximamente pueda debatirse en el recinto, y consideró “justo” po ello este homenaje.

Desde el kirchnerismo, la diputada Sandra Mendoza pidió tener conciencia del terrorismo de Estado y respecto de las tomas de colegios, recordó que “no es ilegal” ese tipo de actitudes. Con relación a los derechos humanos en general, aseguró que “justamente en el peronismo no hacemos política con eso”, considerando “muy bajo hacer politiquería con los derechos humanos”. Trajo a colación la desaparición de Santiago Maldonado, pero aclaró que no le echaba la culpa al Gobierno, y remarcó que “si alguien va a salir en defensa del presidente Macri, que ha ganado legítimamente por los votos, les puedo asegurar que es el peronismo”.

Natalia González Seligra también evocó la “pelea” de los desaparecidos de La Noche de los Lápices, y trajo a colación la pelea actual contra la reforma educativa en la Ciudad de Buenos Aires, que vinculó con la intención de “hacer de los estudiantes mano de obra barata”, y consideró “el mejor homenaje” estar “en las calles luchando”.

Julio Raffo se asoció al recuerdo de las víctimas del “siniestro terrorismo de Estado”, y sostuvo que “cuando hay un delincuente que ejecuta su crimen con el uniforme de la patria, con los vehículos que les da el Estado, involucra con su acción al Estado, que es el primer interesado en reprimirlo, para no configurar los delitos de lesa humanidad”. Desde el Frente Renovador, Cecilia Moreau aclaró que no se hacía eco de los que vinculan la actualidad con la época de la dictadura, pero aclaró que “han pasado 44 días sin saber nada de Santiago Maldonado, y el Gobierno no da la cara y eso no puede ocurrir, porque es desidia”. En ese marco, le apuntó a la ministra Patricia Bullrich, por haber dicho “tres veces cosas distintas de los hechos”, considerando entonces que “no está en condiciones de llevar adelante su gestión”.