Gabriela Michetti participó junto a los presidentes de Brasil, Colombia y Panamá de la cena convocada por el líder de Estados Unidos para analizar la situación en el país caribeño. Condenaron a Maduro pero pidieron seguir negociando “una solución pacífica”.
En representación del presidente argentino, Mauricio Macri, la vicepresidente Gabriela Michetti participó este lunes de una cena convocada con mandatarios de la región por el presidente norteamericano, Donald Trump.
El cónclave, del que participaron los presidentes de Brasil, Michel Temer; de Colombia, Juan Manuel Santos, y de Panamá, Juan Carlos Varela, tuvo como objetivo analizar la crisis en Venezuela y su impacto en la región. De la comida participó también el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence.
El encuentro se prolongó durante un par de horas, y arrancó con las palabras del anfitrión, Donald Trump, quien agradeció la presencia de los dignatarios invitados, a quienes expresó su preocupación por la situación en el país caribeño. En ese marco, Trump calificó al gobierno de Nicolás Maduro como “una dictadura”, causante de “una crisis social y económica”, y advirtió que la situación provoca “hambruna en el pueblo venezolano”.
Trump instó a los gobiernos presentes en la cena a ejercer presión sobre Caracas para “cambiar la situación” en ese país y les agradeció los “esfuerzos” que realizan en ese sentido.
Según informó la agencia Télam, al ser consultadas sus opiniones sobre la situación venezolana, Michetti contó que “quedó claro que los países que estábamos ahí estamos unidos sobre lo que pensamos de la situación de Venezuela”.
En ese sentido destacó una “absoluta unanimidad” en “condenar lo que hace Maduro y el gobierno venezolano por su postura autoritaria y por la sistemática violación a los derechos humanos”.
Los mandatarios de la región instaron a seguir negociando una solución pacífica, de modo tal que “el pueblo venezolano no sufra más consecuencias violentas”.
Al hablar, Michetti recordó que el gobierno de Mauricio Macri mantuvo desde el principio “una muy vehemente condena a la violación de los derechos humanos” y destacó que “esa línea se va a continuar”. Contó la vicepresidente que fue ahí cuando Trump destacó la relación que mantiene con el mandatario argentino y “la buena amistad que tiene con él”. Destacó además que “apoya todo lo que está haciendo”.
