Tras el fallido intento de la ministra de Educación, Soledad Acuña, de conciliar con los estudiantes secundarios que mantienen la toma de 30 escuelas a modo de rechazo de la reforma educativa “Secundaria del Futuro”, la vicepresidenta primera de la Legislatura, Carmen Polledo, y el presidente del FIT, Marcelo Ramal, dialogaron con parlamentario.com para analizar la postura de los adolescentes frente a la medida.

Al respecto Polledo aseguró que desde el oficialismo tienen “una preocupación tremenda porque vemos que un grupo que es minoritario toma de rehén a un montón de alumnos que están perdiendo días de clase y que no pueden recuperar esos días” y advirtió que “no nos parece que sea la manera de llevar adelante un reclamo, tomar una escuela es de un grado de irresponsabilidad muy grande, sobre todo por los adultos que hay metidos detrás de todo esto”.

“No podemos obviar que acá hay una cuestión política en función de las elecciones de octubre, nosotros sabemos que hay gente grande, partidos políticos y legisladores que impulsan y avalan esta medida”, denunció y explicó que “la ministra convocó a una reunión amplia con todos los representantes de los colegios tomados y se apostaba al diálogo, esperábamos tener una reacción positiva pero no fue así”.

Además afirmó que no se trata de “consultar sobre la reforma, la ministra Acuña trabajó en ella durante un año y medio con los distintos establecimientos en donde se iba a implementar, con los representantes de centros de estudiantes de esas escuelas” y precisó que “queremos encontrar puntos de acuerdo con los estudiantes y esto también fue rechazado, entonces suena a capricho; detrás de todo esto hay una cuestión de tinte netamente político, la gran responsabilidad de esto es de los adultos”.

A su vez explicó que le “interesa que los padres se involucren, por eso apelamos a la responsabilidad ciudadana de que quienes no estén de acuerdo con la medida de toma de colegios alcen su voz; acá hay gremios y legisladores que les acercan comida y sistemas de audio para que expresen, esto es una cuestión fogoneada por adultos”.

“La reforma no se va a postergar de ninguna manera, nosotros estamos convencidos de que esta medida y creemos que la escuela tiene que tener una reformulación que se acomode al siglo XXI”, sentenció la diputada del Pro.

Por su parte Ramal indicó que “la razón del fracaso de la reunión que mantuvo la ministra de Educación Soledad Acuña con los estudiantes secundarios tiene que ver con que no retiran este proyecto que ha sido rechazado por toda la comunidad educativa” y manifestó que “se tiene que abrir un debate de fondo e indudablemente el Gobierno tiene que ver que la juventud rechaza la reforma, la cual liquida contenidos fundamentales de su quinto año y los entrega como mano de obra precarizada a las empresas”.

En este sentido consideró que “el Gobierno está tratando de introducir una reforma con guante blanco, es decir, que la reforma comienza a implementarse y luego los elementos más controvertidos se debaten un poco más adelante” y remarcó que “ninguna empresa va a ceder sus instalaciones para que adentro funcione una suerte de taller escuela, esto es absurdo y están tratando de disfrazar las cosas para que la reforma se comience a implementar”.

“Estamos ante una descalificación de la educación que es el resultado de la descalificación que se está queriendo poner en marcha en el mercado de trabajo”, aseguró y advirtió que el hecho de que “el Gobierno diga que nosotros apoyamos a los estudiantes con alimentos para que mantengan las tomas de colegios es una falta de respeto a los estudiantes; es notable que en un país donde se le otorgó a la juventud el voto a los 16 años y en donde el oficialismo considera que a partir de los 14 puedan ser penados por la ley, digan que ante el reclamo por la educación son marionetas”.