Mar del Plata (Enviado Especial) La jefa del bloque del Frente Renovador en la Cámara de Diputados, Graciela Camaño, remarcó la importancia de los consensos y habló del “hartazgo” con el gobierno anterior, durante su participación en el Coloquio de IDEA en Mar del Plata, donde además resaltó la reforma del Ministerio Público pendiente, a partir del procesamiento de la procuradora Alejandra Gils Carbó.

En primer lugar, Camaño lamentó que no haya habido debate entre candidatos a senadores nacionales por la provincia de Buenos Aires, ya que “la agenda que viene va a tener fuertes implicancias sociales”.

A continuación, se refirió a la sensación de “hartazgo”. “Uno advierte por estos días cómo el hartazgo con el gobierno anterior ha generado empatía con cualquier situación. El hartazgo habilita que todo sea posible”, dijo, en una interpretación de la adhesión a Cambiemos.

Por otra parte, se quejó de que “por estos días toda crítica, en lugar de tomarse como una crítica que aporta la posibilidad de mejorar la situación, se toma como un ‘malagüerismo’ por parte de la oposición”. “Todas las críticas no son aceptadas, pero sin embargo han logrado que pudiéramos plasmar en mucha de la legislación muy buenos aportes”, destacó.

Asimismo, Camaño convocó a “subir la vara”. “Los legisladores tenemos la responsabilidad de lograr los consensos mínimos para modificar las instituciones. Si suponemos que un hombre o una mujer van a poder solucionar los problemas, nos vamos a tropezar con la misa piedra”, pronosticó.

En tanto, advirtió que “no se han generado controles desde la década del ‘90” y agregó la necesidad de revisar en el Congreso la regulación del Consejo de la Magistratura, así como la reforma del Ministerio Público, a propósito del reciente procesamiento de Gils Carbó.

Por último, la massista llamó a “cortar el péndulo” y negó que para gobernar se necesite sólo “la legitimidad de origen”, si bien la consideró “imprescindible”. “No se puede ir por todo”, consideró.

Al finalizar se refirió a la reforma laboral que el Gobierno piensa implementar después de las elecciones y cnsideró “una falta de respeto” hablar de este tema “creyendo que un proyecto en el Congreso lo resuelve”. “Ninguna reforma laboral tiene continuidad en el tiempo si no se logra con el debido consenso social y no es sellada por el correspondiente consenso político en el Parlamento”, sintetizó.

Acompañaron a Camaño en el panel el presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó; el jefe del bloque de diputados de Cambiemos, Mario Negri; Diego Bossio por el bloque Justicialista; y el titular de la bancada del PJ-FpV en la Cámara alta, Miguel Pichetto.