Los gremios de la empresa estatal Yacimiento Carnoníferos Río Turbio (YCRT) se reunieron en Buenos Aires con referentes del Frente Renovador. Solicitaron que el gobierno nacional “pare inmediatamente el vaciamiento de Río Turbio”, afirmaron.
La diputada nacional Graciela Camaño encabezó en el Congreso una reunión con funcionarios, legisladores y representantes sindicales de los trabajadores de las minas de Río Turbio, quienes mantienen una protesta luego de recibir las primeras 215 notificaciones de despido -a los que se sumarían otras 500-, en rechazo a la decisión de reducir la planta de trabajadores por parte de la administración de Cambiemos. En ese marco, la jefa del bloque de diputados del Frente Renovador les manifestó su apoyo, y destacó la importancia de sostener la mina de Río Turbio “no solo porque es un polo para la región de la cordillera, sino porque es un mojón de soberanía para nuestro territorio”.
La legisladora afirmó “vemos con mucho asombro la cantidad de gente que se viene despidiendo. El Frente Renovador, en el 2013 y 2015 dejó clara su postura sobre la mina de Río Turbio. Creemos que debe ser sostenida en un punto de referencia especial para nuestro territorio”.
“Vemos muchos amigos del Gobierno en negocios de energía eólica y poco o nada de inversión para este tipo de energía como la mina de Río Turbio. No queremos creer que haya intereses inconfesables en algunos funcionarios del Gobierno”, afirmó Camaño.
Miguel Páez, secretario general de ATE, seccional Río Turbio afirmó que “podemos generar el 1% del interconectado nacional y de esta manera darle energía a cuatro provincias. Hoy por decisión del Gobierno se está llevando a un vaciamiento de la mina de Río Turbio, lo que va a terminar con el abandono, el hambre y la miseria de más de 30 mil familias de esa ciudad y de 28 de Noviembre”.
“Por eso queremos solicitar al Gobierno que desista de esta actitud, que ponga en funcionamiento la usina 240, lo que le significaria ahorrar más de $240 millones en producción de energía”, agregó Páez.
Finalmente afirmó que “por decisiones del gobierno y complicidad de funcionarios están condenando a dos comunidades”, y agregó que “hoy recibimos el apoyo de Juan Carlos Schmid de la CGT y dirigentes de la región. Hay gente que depende de la produccion del carbón, pedimos que el gobierno desista de esta actitud”.
Doce empleados de la empresa estatal Yacimiento Carnoníferos Río Turbio (YCRT) tomaron la mina en rechazo al plan de reducción de un 35% de las jefaturas y el esquema de despidos y retiros voluntarios iniciado por decisión de la intervención estatal.
Los 400 telegramas de despidos enviados y la invitación a tomar los retiros voluntarios también impactaron de la peor manera en las localidades de Río Turbio y 28 de Noviembre, cuya economía gira en torno a la empresa de carbón.
La Cuenca Carbonífera (conformada por las localidades Río Turbio y 28 de Noviembre), vive de la actividad minera: la extracción de carbón ha sido durante décadas la principal actividad de estos poblados santacruceños. La empresa YCRT, intervenida desde 2002, es subsidiada por el Estado y concentra el mayor porcentaje de puestos de trabajo de la zona.
Estuvieron presentes en el encuentro llevado a cabo en el Anexo del Congreso de la Nación, el intendente de Río Turbio, Atanasio Pérez Osuna, el dirigente de ATE Daniel Castellón, de la Asociación de Profesionales y Técnicos, Oscar Sánchez y Pablo Mercado, del Sindicato de Luz y Fuerza, Pablo Navarrete y Luis Abeldaño, de la Fraternidad, Guillermo Barrionuevo y los diputados provinciales Hugo Garay y Dario Mena, el presidente del Concejo Deliberante de Río Turbio, Nicolás Brizuela y el consejal Cristian Trujillo.
